Las cifras de la pandemia siguen altas, de las más elevadas del Estado, y pese a la evolución ascendente en las Pitiüses, la situación en Mallorca se desacelera. Si el pasado viernes 27 de julio, la Isla alcanzaba una incidencia a 14 días de 1.003 casos por 100.000 habitantes, en un mes que superó todos los récords de casos, la de este lunes había bajado a los 847. Es más, el mismo indicador, a siete días, indica que la situación a corto plazo seguirá mejorando.
El portavoz del Govern, Iago Negueruela, señaló que se entraba en fase de contención y que es cuestión de días que bajen las infecciones.
Sin embargo, la situación todavía está por crecer en los hospitales, como bien se ha visto en anteriores olas donde a medida que se registran contagios, algunos casos empeoran. Ayer había 369 personas ingresadas por COVID, de las que 61 estaban graves en las UCI.
Embarazadas y vacuna
Sólo uno de los ingresos corresponde a estas alturas a las seis mujeres embarazadas de las que dio cuenta el pasado viernes el IB-Salut. Se trata de uno de los tres casos que acogía Son Llàtzer, por hiperémesis gravídica, que ya no presenta síntomas de COVID.
Las otras cinco recibieron el alta médica. Cabe recordar que a partir del miércoles pueden acudir sin cita previa a los vacunódromos de Son Dureta, Inca y Manacor, para inmunizarse, ya que una infección por coronavirus puede gravarse en estado de gestación.
La otra franja de población que estaba llamada a completar la pauta este fin de semana era la de 60 a 69 años, que tenía cita a lo largo del mes de agosto para ponerse la segunda dosis de AstraZeneca. De las más de 6.000 personas contabilizadas, 1.800, cerca de un 30 %, siguieron los requerimientos de Salut.
La campaña avanza en agosto hacia la inmunidad de rebaño entre la población diana de más de 12 años. Este lunes, 653.767 personas habían recibido las dos dosis de la vacuna, esto es un 63,2 %. Por destacar una cifra significativa, más de la mitad de la población entre 16 y 39 años ya llevan una dosis y cerca del 35 % la pauta completa.
Los datos avanzan de forma optimista mientras la tasa de positividad sigue en el 12,85 %, demasiado alta como para poder bajar la guardia.