La Dirección General de Tráfico ha destinado a Baleares tres de los 39 drones que vigilarán las carreteras españolas durante este verano para detectar conductas temerarias y prevenir accidentes en tramos de alto riesgo y con mayor tránsito de usuarios vulnerables, como ciclistas, peatones o motociclistas.
Según ha explicado Delegación del Gobierno en Baleares en nota de presa, este jueves se ha llevado a cabo la presentación de los dispositivos a cargo de la directora de la DGT de Baleares, Francisca Ramis, el jefe de la Unidad de Medios Aéreos, Rubén Miguel López, y el capitán de la Agrupación de tráfico de la Guardia Civil, Félix Peleteiro.
La DGT, que cuenta con la acreditación correspondiente de la Agencia Estatal de Seguridad Aérea para el uso de estos drones, ha formado a un total de 35 personas para el pilotaje de los aparatos y a otras 60 para el manejo de las cámaras que los integran.
Todos los dispositivos funcionan a una altura de 120 metros y alcanzan una velocidad de hasta 80 km/h gracias a sus hélices. Además, pueden soportar temperaturas de entre 20 y 45 grados y disponen de una autonomía de 40 minutos, periodo tras el cual se debe proceder al cambio de batería antes de retomar el vuelo.
Pionero en el uso de drones para el tráfico
Desde 2018, año en que se inició la actividad de vigilancia del tráfico con drones, la DGT lleva acumuladas 500 horas de vuelo con estos sistemas en todo el país y ha realizado el seguimiento de más de 55.000 vehículos, detectando más de 600 infracciones.
De hecho, los drones se han convertido en «uno de los medios más efectivos» para controlar el uso del teléfono móvil al volante --12,5 por ciento de las infracciones--, así como el uso incorrecto del cinturón y otros sistemas de retención infantiles y el adelantamiento a ciclistas sin respetar la distancia mínima de seguridad.