Mallorca se ha convertido este verano en uno de los destinos favoritos para el turismo de lujo europeo. Un viajero que busca la máxima personalización, huye de lo clásico y puede gastarse más de 5.000 euros diarios.
La mayoría de los visitantes de alto caché son centroeuropeos, nórdicos, británicos, franceses y alemanes y viajan en jet privado. Los turistas de estas nacionalidades hacer viajes transoceánicos pero debido a la pandemia han cambiado de planes este verano.
El turista de lujo tiene un gasto medio de alrededor de 5.000 euros por día y se caracteriza por ser una persona casada, con hijos y con edades comprendidas entre los 40 y los 55 años. Cuenta con unos ingresos medios anuales superiores a los 150.000 euros y posee estudios superiores.
Este tipo de cliente está en alza. A pesar de la crisis derivada de la pandemia, su número ha crecido en los últimos meses. La mayoría de ellos, además de las vacaciones estivales, suele viajar para conocer el patrimonio, gastronomía y la cultura en espadas que no se centran únicamente los meses de verano.