El Parlament balear, más allá de su actividad habitual y de la preparación de los plenos como los que se celebran cada martes, vive estos días un cierto trasiego de papeles y documentos. Ha decidido ordenar su archivo y abrirlo parcialmente –en principio de manera no presencial y a través de las redes sociales– a toda la ciudadanía.
Joana Maria Pastor, licenciada en Documentación y en Historia, es la archivera del Parlament, función que ocupa hace unos meses después de haber pasado antes por el archivo de Palma y también por el de la Catedral.
El archivo de la Cámara balear no tiene una ubicación fija. De hecho, todo el material está desperdigado por diferentes departamentos y buena parte de la documentación en papel de las primeras legislaturas se halla depositado en un almacén de un polígono de Bunyola.
Estos días, las cajas se amontonan en salas del edificio donde los grupos políticos tienen sus despachos. Allí, en la planta sótano, se amontonan cajas.
Mañana miércoles se celebra el Día de los Archivos y desde hace una semana, la Cámara ofrece información en su web. Mañana se colgarán varios vídeos, sumándose a una iniciativa de los diferentes archivos de Balears y otras comunidades.
Hasta 2006
Los libros con el registro de telegramas enviados y recibidos llenan decenas y decenas de cajas de cartón. En aquella época, todas las convocatorias a las sesiones se hacían por telegrama. El primero es del 13 de octubre de 1983 y va dirigido a Cosme Vidal, un diputado de AP. Se le cita para la constitución de la Comisión de Hacienda y Presupuestos de la que formaba parte.
Pastor asegura que le gusta manejar papel y tocarlo pero que el Archivo del Parlament es accesible para cualquier persona» y que «es como cualquier otro pero sin sala de lectura», que es la propia red. «Cualquier expediente, cualquier actuación puede ser consultado a través de la página de internet», dice. Además, eso es así en cumplimiento de la Ley de Transparencia que obliga a las Administraciones a facilitar la consulta de cualquier expediente».
Hasta 2006, todas las comunicaciones internas de la Cámara se hacían en papel pero la primera visita al archivo será «virtual».
«Este miércoles se celebra el Día de los Archivos y es una buena ocasión para difundirlo», asegura Pastor. En el edificio de despachos, el Ramon Llull, se conservan comunicaciones, boletines oficiales y acuerdos relacionados con la Intervención y otros departamentos. Al principio, las sesiones se grababan en cintas sin soporte de imagen. Hay cajas de ‘cassettes'.
«En las visitas institucionales se muestra la biblioteca pero no el Archivo», dice. Visitas que se han vuelto a reanudar, con limitaciones y reducción de aforo, después de las restricciones que se tomaron después de la pandemia.
Entre la documentación –además de todo los relacionado con las tramitación de la leyes– también se conservan contratos y comunicaciones entre la Mesa y los grupos parlamentarios. Asimismo hay referencias a actividades paralelas que se han celebrado en la Cámara desde que inició su andadura en 1983.