La próxima semana se van a actualizar las restricciones y, de acuerdo con la buena evolución epidemiológica, las Islas avanzarán en la desescalada. Las nuevas medidas entrarán en vigor el 6 de junio, tras su aprobación el viernes previo, previsiblemente. Una de las actividades que se podría flexibilizar es la de los cáterings y eventos, un sector que hace tiempo que reivindica un protocolo propio para poder reiniciar su actividad.
El presidente de la asociación de cáterings de PIMEM, Jordi Calvache, se mostró esperanzado en que a partir de principios de junio se les permita aumentar el aforo. «Así nos lo han transmitido desde el Govern», señaló.
En estos momentos, el aforo para los eventos es de 50 personas en exteriores y 20, en interiores. Se trata de unas cifras que hacen prácticamente inviable su actividad, paralizada desde que finalizó la temporada de 2019. «Esperemos que se amplíen los aforos de forma progresiva, en función de la situación sanitaria», indicó Calvache, quien valoró que el Govern esté dispuesto a tener en consideración a este sector.
Además de poder celebrar eventos para un mayor número de personas, la asociación de cáterings también reclama que las mesas puedan estar ocupadas por al menos 10 comensales. «En estos momentos solo pueden ser de cuatro, como en la restauración, algo que no sale a cuenta», explicó el presidente de la entidad. La patronal aspira a contar con un protocolo propio, con las correspondientes medidas de seguridad.
Por su parte, la consellera de Salut, Patricia Gómez, explicó ayer que el Govern ya trabaja en la puesta en marcha del pasaporte verde que facilitará la movilidad por Europa a partir de julio, si bien el Govern estudia la posibilidad de darle más usos como es el acceso a determinadas actividades. En este contexto, más allá del certificado digital, el Ejecutivo trabaja en el sistema para proceder a su lectura, que podría ser a través de un código QR.