El portavoz de enfermedades infecciosas del Govern, Javier Arranz, ha asegurado que, «aunque es cierto que buscamos vacunaciones completas, con las dos dosis, es cierto, como apuntan diversos estudios como los de Israel, donde prácticamente se ha vacunado a toda la población, que entre dos y tres semanas después de la administración de las primeras dosis, hablamos de eficacias de entre 75 y 78 por ciento», que llega hasta el ochenta por ciento en los días previos a la recepción de la segunda dosis.
«A nivel poblacional es una eficacia más que buena para evitar ingresos y muertes», ha recalcado el experto, que ha apuntado que «no nos debemos fijar solo en las segundas dosis, sino que sabemos que una primera dosis nos ayuda de alguna forma. Eso no lo sabíamos al principio», ha añadido, poniendo en valor por ejemplo la estrategia emprendida por Reino Unido, que desde el principio apostó por administrar solo una dosis a la mayor cantidad posible de personas, con el fin de evitar desarrollos más graves de la enfermedad.
En este sentido, Arranz ha reforzado la tesis expuesta anteriormente en la misma rueda de prensa por la consellera de Salut, Patricia Gómez, quien ha apuntado que «una de cada siete personas de las Islas ya tienen algún beneficio», unas 120.000 personas en total, derivado de la administración de al menos una dosis de las vacunas.