Dorita, una tortuga rescatada en el mar balear, es la primera paciente de 2021 del centro de rescate de Mallorca. A través de Instagram, la Fundación Palma Aquarium ha mostrado imágenes del animal que fue localizado flotando en aguas de Cap Formentor, en Pollença.
La tortuga ha sido bautizada como Dorita, aunque los biólogos del centro de recuperación sospechan que es un macho. Hace unos días, unos particulares la encontraron en mal estado en el mar y llamaron rápidamente a los servicios de emergencias para su rescate. Los protagonistas de la hazaña ya salvaron en 2017 a Kalos, un quelonio que tenía el caparazón lleno de epibiontes, unos pequeños seres vivos que se aferran a la piel de los animales marinos.
La fundación conservacionista, que trabaja por el bienestar de la fauna marina balear, explica en sus redes sociales que el animal se ha sometido a una revisión en la Clínica Veterinaria Aragó y «en principio no parece tener nada demasiado grave». Ahora se encuentra en las instalaciones de Palma Aquarium donde se mantendrá durante su periodo de recuperación y allí se encargarán de administrarle la medicación y darle los cuidados necesarios para que pronto pueda regresar libre al mar con el resto de compañeras.
El centro de recuperación de fauna marina de Palma Aquàrium está gestionado por el Centre de Recuperació de Fauna Silvestre (COFIB), organismo perteneciente a la conselleria de Medi Ambient, allí rescatan, rehabilitan y liberan a decenas de tortugas cada año.
Desde la fundación alertan de que los efectos de los plásticos y los restos de redes en las especies marinas son actualmente el problema más grande que tienen que gestionar los Centros de recuperación de fauna marina. Durante 2020, se registraron 84 casos de varamientos de tortuga marina adulta. De estos, al menos 31 casos (un 37 %) fueron provocados por enmallamientos con plásticos, redes y basura.