La ‘Nauticopesquera', así es como la conoce hoy, está situada desde hace unos treinta años en el Dique del Oeste. Aunque en los últimos 220 años su sede ha estado ubicada en distintos lugares de Palma y ha tenido diferentes nombres, siempre ha mantenido un mismo objetivo, formar a los mallorquines en el arte de la navegación profesional.
En el presente curso 2020/21 tiene a 180 alumnos matriculados, que estudian para ser un día maquinistas navales o patrones de altura, las dos ramas fundamentales de formación en esta escuela de referencia. Actualmente se trata de una Formación Profesional de grado superior destinada a conseguir acercar a los alumnos a la realidad laboral de un sector complejo técnicamente. Además de la formación de los jóvenes, también se imparten estudios específicos para los profesionales ya embarcados, como los cursos de formación básica (marinero), de puente, contraincendios, supervivencia en el mar, etc.
La escuela la formación teórica es de un nivel medio-alto, ya que el objetivo final, ser patrón de un barco o jefe de una sala de máquinas, es un trabajo de gran responsabilidad.
Varias son las grandes empresas que colaboran con la Formación Profesional, destacando entre ellas Astilleros de Mallorca, que desde hace ya diez años ayuda a los alumnos de FP de la nauticopesquera a cerrar su ciclo formativo con una experiencia real y obligatoria que durante meses los acerca a sus talleres de mecánica, soldadura, electricidad o hidráulica.
Los jefes de taller de Astilleros de Mallorca enseñan a los alumnos de la ‘Nauticopesquera', que depende de la Conselleria de Educación y el SOIB, los secretos del oficio. Limar, soldar, pulir, reparar, reemplazar, todo se hace real, tangible y duro en un taller profesional.
Los alumnos más destacados suelen ser contratados en el mismo astillero o por empresas de su órbita. Se trata por tanto de un ciclo formativo muy bien planificado que se inicia en la ‘Nauticopesquera', formalmente Centro Integrado de Formación Profesional Nauticopesquera, cerrándose finalmente embarcados en buques de diferentes portes y tipología. Una combinación perfecta de teoría y prácticas en el conocimiento de las más modernas técnicas de navegación y reparación.
La ‘Nauticopesquera' está dirigida desde 2010 por el oficial de máquinas Toni Mulet y el ingeniero Felipe Esteve, que es su jefe de estudios desde 2008. Ambos llevan el rumbo de este centenario centro de FP de ciclo superior.
Perfectamente adaptados
El director de la escuela, Toni Mulet, explica que «nos hemos adaptado a las nuevas tecnologías y disponemos de un centro con equipos de docencia de gran nivel. Tenemos simuladores de puente y de sala de máquinas, lo que nos permite reproducir cualquier situación que se pueda vivir en un buque. De este modo, los alumnos sabrán responder ante incidencias de navegación o técnicas que pueden, con una buena resolución, salvar vidas o buques».
Mulet explica también, en relación con las prácticas que se realizan en la industria, que «la colaboración constante con Astilleros de Mallorca y otras empresas más pequeñas del sector es vital para que los alumnos puedan tocar con las manos talleres reales, herramientas y equipos que tienen esas grandes empresas y que una escuela no podría nunca comprar o mantener».
El jefe de estudios, Felipe Esteve, asevera por su parte que «en Astilleros de Mallorca también nos proveen de motores, generadores o hélices y equipos que han reemplazado y que luego aquí montamos y desmontamos una y otra vez con los alumnos».
Incluso, profesorado del centro, entre los que se incluye el mismo, vienen realizando estancias durante los últimos tres años en Astilleros de Mallorca para conocer de primera mano técnicas y procesos nuevos en el sector de la reparación, mantenimiento y refit de grandes yates.
Felipe Esteve es optimista con el futuro de las profesiones de patrón o mecánico naval: «El sector náutico funciona muy bien en las Islas y da trabajo a miles de personas, por lo que formar a los jóvenes para entrar en ese sector es vital. Nuestra escuela ha funcionado durante más de doscientos años y sin duda tenemos trabajo de formación técnica por delante para muchos años más», dice Esteve.