Las patronales de restauración de CAEB y PIMEM entregaron el miércoles un documento conjunto a la Conselleria de Turisme i Treball con su propuesta de desescalada en el sector. Sugieren una reapertura parcial cuando la incidencia acumulada de coronavirus a 14 días se sitúe entre los 200 y 500 casos por 100.000 habitantes; y que la ocupación de las UCI oscile entre el 31 y el 60 %. Cuando se dé esta situación sanitaria, su propuesta es poder abrir interiores, terrazas y barras al 50 %; mesas de un máximo de seis comensales; y cierre de los negocios a las 22:00 horas, a excepción de viernes, sábados, domingo y vísperas de festivo, que el cierre sería a las 18:00 horas.
En caso de que se superen estos niveles sanitarios, bares y restaurantes permanecerían cerrados. En cualquier caso, se trata solo de una propuesta de las patronales, a partir de la que confían poder trabajar de forma conjunta con el Govern para poder pactar cómo se debe llevar a cabo la desescalada en la restauración.
Los restauradores instan a que las medidas se revisen cada siete días en función de la evolución de los índices sanitarios. Asimismo, se comprometen a mantener los niveles de CO2 establecidos, dar cuenta de los locales que no cumplan las normas y a someterse a la auditoría de terceros para que validen el cumplimiento del plan de desescalada. También reclaman poder actuar a nivel de municipio a la hora de fijar restricciones.
Desde el Govern ya se han mostrado partidarios de no levantar las medidas de golpe a partir del próximo día 14, cuando deben revisarse, pese a una evolución favorable de los contagios en Mallorca.