La Asociación de Vecinos de Son Rapinya ha mostrado su «indignación» y descontento sobre la organización del cribado masivo de COVID-19 que empezará en los próximos días en el municipio palmesano.
Los vecinos aseguran que la decisión de hacer las pruebas en el pabellón deportivo de Son Cotoner, situado al otro lado de la Vía de Cintura, «sin comunicación por autobús y en una zona de difícil aparcamiento, supone un jarro de agua fría para la población del barrio, especialmente para las personas mayores, porque dificulta enormemente poder acudir a hacerse las pruebas».
La asociación de vecinos explica que se ha puesto en contacto con la coordinación de estas pruebas para proponer que se trasladen al pabellón deportivo Juan Seguí. «Al parecer no se puede hacer debido a que en el pabellón está previsto un partido oficial de hokey. La oferta de la casa regional de Valencia (situada en la antigua bolera de la Vileta) como alternativa no se ha considerado adecuada por las autoridades sanitarias. Tampoco se han aceptado otras propuestas como usar carpas, habilitar una línea de bus específica Son Rapinya-Son Cotoner para estos días o reservar una zona de aparcamiento en Son Cotoner delante del pabellón», lamentan desde la asociación.
Esta situación crea entre los vecinos del barrio una sensación de «indignación y desagrado» por el hecho de que un partido de hokey «se anteponga a las necesidades de los vecinos del barrio en materia de salud».
Por otra parte, también critican la organización de la pruebas, ya que consideran que «un cribado sanitario se realiza de forma muy diferente, con zonas perimetrales cerradas y análisis sistemáticos a toda su población. No negamos el valor de las pruebas que se ofrecen y animamos a participar, pero la eficacia de lo que se va a hacer está muy por debajo de la que aporta un cribado».
Finalmente, lamentan que no se haya contado con la asociación de vecinos y otras entidades del barrio para planificar las pruebas.