El vidrio y los plásticos son el tipo de basura más frecuente en el lecho marino de Baleares, según un estudio del Centro Oceanográfico de Baleares del Instituto Español de Oceanografía (IEO) a partir del estudio de la presencia de residuos y de su ingesta por especies de fondo.
Investigadoras de Baleares han analizado diferentes aspectos relacionados con la presencia de basura marina en áreas del Mar Balear expuestas a presiones antropogénicas (causadas por el hombre) como los factores que determinan la distribución de los plásticos presentes en el fondo marino o la ingesta de microplásticos por especies de fondo y los efectos fisiológicos asociados.
Los análisis, realizados en los últimos cinco años, forman parte de una tesis doctoral que defendió la investigadora Carme Alomar en la Universitat de les Illes Balears (UIB) y desarrollada íntegramente en el Centro Oceanográfico de Baleares del IEO bajo la dirección de las investigadoras Salud Deudero y Beatriz Guijarro, ha informado el IEO en un comunicado.
La investigación empezó abordando la problemática de la basura marina a escala global en la cuenca del Mar Mediterráneo, revisando las áreas más afectadas y determinando la ingesta de plásticos en especies marinas así como la colonización y dispersión de especies asociadas a los plásticos marinos.
El estudio se centró después en la cuantificación y caracterización de las basuras marinas en Baleares, analizando los factores que determinan la distribución de los plásticos en áreas más expuestas a actividades humanas en esta zona del Mediterráneo occidental.
El nexo entre la ingesta de plásticos por parte de especies con diferentes niveles tróficos (peces, tiburones y rayas, cefalópodos y crustáceos) y la abundancia de plásticos en el fondo marino se analizó de manera simultánea.
La investigadora estudió mediante biomarcadores la incidencia de microplásticos en el sistema digestivo de dos especies de fondo de interés comercial como el salmonete (Mullus surmuletus) y la pintarroja bocanegra (Galeus melastomus).
Los resultados ponen en evidencia la presencia de basuras marinas en la plataforma continental y el talud del Mar Balear. Tras el vidrio, los plásticos son la segunda fracción de basura más abundantes, con un valor medio aproximado de 3 kg/km².
El estudio ha demostrado además que la distribución de éstos viene determinada por factores geográficos como el área de estudio, la distancia a la costa y la profundidad.
La ingesta de microplásticos en el 45 % de las especies estudiadas, así como la presencia de plásticos en las mismas áreas, evidencia la relación entre estos dos indicadores de basura marina.
Así mismo, el hecho de que la ingesta de microplásticos por el salmonete es mayor que en la pintarroja, probablemente está asociado a las diferencias en la abundancia de plásticos con la profundidad.
También demuestra que el uso de biomarcadores puede ser efectivo para estudiar la respuesta fisiológica de los peces a la ingesta de microplásticos, ya que se ha visto que los individuos que ingieren plásticos presentan una mayor actividad enzimática, concretamente de la glutatión S-transferasa (GST).
La investigadora Carme Alomar explica que los resultados «aportan información valiosa para la gestión pesquera y ambiental a escala local, aunque podrían extrapolarse a escala regional y global debido a la presencia ubicua de la basura marina».
«La identificación de áreas más expuestas a la polución por plásticos como el noroeste y suroeste de Mallorca podría tenerse en consideración y contemplarse a la hora de desarrollar planes de conservación y gestión en el área de estudio», añade Alomar.