«No es momento de pensar ni en fiestas ni en comidas de Navidad. Es el momento de volver a frenar el virus y de extremar todas las precauciones». Es la opinión de la presidenta del Govern, Francina Armengol, quien en el acto de celebración del Día de la Constitución ha lanzado la advertencia de que el Govern adoptará «medidas contundentes» si las contagios continúan y Baleares no es capaz de doblegar la curva. «Están en juego vidas humanas», ha dicho.
La pandemia de coronavirus ha marcado por completo la fiesta del 42 aniversario de la Constiución, que se ha celebrado bajo un frío glaciar en el patio del Palau de l'Almundaina en presencia de apenas una veintena de invitados que vieron un vídeo en el que un grupo de trabajadores esenciales leían artículos de la Carta Magna. Como ya es habitual, ningún representante de Més ha acudido al acto de celebración.
El coronavirus ha marcadp también las intervenciones de la delegada del Gobierno, Aina Calvo, y de la presidenta del Govern, pero Armengol también se ha referido a la necesidad de reformar la Carta Magna para avanzar a un «federalismo de facto», una petición que viene realizando hace años. Ha reclamado además una aplicación efectiva de la Carta Magna para que algunos de los derechos que recoge queden garantizados de manera más real, como la protección a las personas mayores o el derecho a la vivienda digna, «que no siempre se cumple».
La delegada del Gobierno, Aina Calvo, ha defendido en su intervención que la Constitución no es solo de eso partidos o instituciones, sino del conjunto de la sociedad. «Nuestra Constitución se conjuga en plural», ha dicho. La delegada ha defendido la igualdad efectiva que propugna la Carta Magna y aseguró que el pacto constitucional es la esencia de la «unidad en la diversidad». También ha pedido que no se «manipulen las emociones» en materia de inmigración y alabó el papel que están jugando la Guardia Civil y la Policía Nacional en esta materia.