El Hospital Universitario Son Espases de Palma, centro sanitario de referencia en Baleares. ha empezado a reforzarse de cara a lo que pueda ocurrir con la pandemia el mes que viene, unas semanas marcadas por la Navidad. Esta semana han contratado a 18 enfermeras y 8 auxiliares para formarlos y que se sumen a los alrededor de 170 profesionales que se han incorporado desde marzo.
Son Espases, que acaba de cumplir su décimo aniversario, es una pequeña ciudad donde 5.100 trabajadores atienden a la población del sector sanitario Poniente de Mallorca, que tiene 338.852 tarjetas sanitarias de Palma y de los municipios de Andratx, Calvià y Esporles. Además, es el hospital de referencia terciaria para el más de un millón de habitantes de la comunidad (1.127.998 tarjetas sanitarias).
20 plazas UCI
Son Espases tiene una media de 757 camas funcionales de hospitalización y cuenta con 44 plazas de UCI de adultos. En total, las unidades de críticos son 97, contando las de Adultos, Pediátrica, Neonatal, Cuidados Intermedios Neonatales y Reanimación.
El hospital va ocupando las camas con pacientes covid-19 en función de las necesidades. Este martes (17 de noviembre) había 50 personas ingresadas con coronavirus, de las que 36 estaban en planta y 14 en UCI.
De las 44 camas de UCI de adultos, 20 están destinadas en exclusiva a pacientes covid-19, pero en el caso de que hagan falta más, se habilitan otras empezando por las de reanimación.
Ya ha ocurrido: han llegado a atender simultáneamente un pico de 33 pacientes con covid en cuidados intensivos en abril. Estiman que Son Espases podría alcanzar casi el centenar de UCI si fuera necesario.
Sobrecarga e indignación
Entre los profesionales hay «cansancio y sobrecarga, sobre todo en la UCI, pero aguantan», asegura el presidente del Sindicato Médico de Baleares (Simebal), Miguel Lázaro. «El clima que hay en Son Espases entre los médicos es de un agotamiento psicofísico, sobre todo de los servicios relacionados con la covid, por las muertes de profesionales, que van 69 médicos en toda España, y por el miedo al contagio», añade.
Asegura que, además, genera «mucha indignación» que Baleares sea la única comunidad autónoma de España donde a los sanitarios, como al resto de empleados públicos autonómicos, no se les va a aplicar el 2 % de subida salarial estatal en 2020 y el 0,9 % de 2021. «Y además es la única comunidad autónoma donde no hay 'complemento covid', cuando lo que se espera es que la administración reconozca la labor sanitaria, no solo de palabra sino con gestos retributivos, como en todas las comunidades». El día 23 está convocada una concentración de protesta en Son Espases.
Denuncia además que en Son Espases no se sustituye a los médicos que están en cuarentena y que los profesionales del hospital están «sometidos a un estrés crónico acumulativo desde marzo que hace mella». «Pedimos que se haga un esfuerzo para contratar profesionales», reivindica Lázaro.
El responsable de Simebal celebra que desde hace unos días se hagan PCR a todos los pacientes que ingresan en Son Espases y no sólo a los programados y a quienes iban a ser operados (alrededor del 70 %). Lázaro se congratula por la rectificación, ya que esta situación «era un riesgo muy importante para pacientes y profesionales».
Por su parte, el sindicato de enfermería Satse ha denunciado que la Gerencia de Son Espases debe a las enfermeras de la UCI 9.334 horas que, sumadas a los turnos extraordinarios realizados desde enero por la pandemia, ascenderían a casi 10.000 horas.
La organización exige la contratación urgente de 12 profesionales de enfermería para la UCI de adultos y denuncia «el desgaste y la fatiga que arrastra el personal».
Critica además la rotación continua de personal eventual en el servicio de UCI, que supone la incorporación frecuente de profesionales sin experiencia previa en cuidados críticos, una circunstancia que obliga a los más veteranos a formar y tutorizar a sus compañeros, «un esfuerzo considerable cuando se añade a unas cargas asistenciales muy elevadas ya de por sí».
Esfuerzo
La directora médica del Hospital Universitario Son Espases, Carmen Sanclemente, está orgullosa del trabajo que están desempeñando los profesionales del centro desde que se detectara el primer caso en la comunidad, a finales de febrero: «Es un orgullo tener todos los profesionales la capacidad de trabajo, esfuerzo y colaboración y conocimiento que están demostrando. Es un orgullo, no puedes más que felicitarlos y a veces emocionarte con lo bien que han gestionado toda esta presión asistencial», declara a Efe.
Sobre las reclamaciones sindicales asegura que se han hecho contrataciones, se siguen haciendo y se planifican más. Son Espases ha contratado a 176 profesionales desde el principio, el grueso en la primera ola, cuando se incorporaron 118, de los que 13 eran médicos.
«Estamos haciendo una previsión por si esto va mal, porque no se sabe cómo se va a comportar tras los puentes y las Navidades y tampoco sabemos cuándo llegará la vacuna, aunque haya una previsión. Estamos preparando el hospital para que pueda llegar a asumir hasta 113 camas de UCI», explica.
Sobre las demás reivindicaciones asegura que «en principio, todo lo que se pide a sustituir, se sustituye», y defiende que la contratación está planificada para cubrir muchas de las vacaciones que se deben a médicos y enfermeras.
En cuanto al estado anímico de la plantilla, recuerda que Son Espases habilitó un servicio de atención psicológica y psiquiátrica para los profesionales que sigue activo. «Las contrataciones siguen, los refuerzos siguen y este apoyo a los profesionales también», afirma.
463 millones
Son Espases tuvo un gasto consolidado en 2019 de 463,4 millones de euros, un 5 % superior al año anterior. En sus diez años de actividad, el gasto ha aumentado de los 329,4 millones de 2009 a 463,4 del año pasado, un 40,6 %.
Las listas de espera de Son Espases han experimentado una evolución dispar. Las quirúrgicas han aumentado notablemente a causa de la pandemia, de manera que si en septiembre de 2019 había 4.176 pendientes de una operación en el hospital palmesano, en septiembre pasado eran 4.454, un 6,6 % más. Los pacientes que esperan más de tres meses para operarse se han quintuplicado, con 1.305 en septiembre, frente a 242 el mismo mes de 2019. La demora media ha subido un 73 %, de 79 días a 136,8.
En cuanto a las consultas externas, hay 6.138 pacientes esperando, un 38,2 % menos que en septiembre de 2019. Hay 657 pacientes que llevan más de 180 días esperando a ver a un especialista, un 63,4 % menos que hace un año. La demora media ha bajado en 5 días, de 38 a 32,9 (un descenso del 13,4 %).
El Servicio de Salud explica que, en los primeros meses del confinamiento, la covid-19 eclipsó la actividad de quirófanos y consultas externas, atendiendo solo la actividad urgente.
Pasado el confinamiento se pusieron en marcha una serie de medidas durante el mes de junio para «drenar» la lista de espera, que siguen activas y están dando resultados, como el incremento de la actividad ordinaria (los servicios hospitalarios hacen en torno a un 20 % de su actividad en turno de tarde), aumento de la actividad extraordinaria, acuerdos de incremento de productividad en servicios concretos con mayor lista de espera e incremento de la derivación de consultas externas a los centros con convenio singular (Cruz Roja y San Juan de Dios) y con la sanidad privada.
En cuando al hecho de que la lista de espera quirúrgica haya aumentado mientras baja la de consultas externas, el Servicio de Salud explica que se han podido realizar muchas consultase externas por vía telemática.