El PIB balear podría reducirse un 20% en 2020 debido a la fuerte contracción del turismo, una duración mayor que la esperada de las medidas de confinamiento, y la aplicación de algunas restricciones que afectan a la demanda interna. Para 2021, la recuperación podría alcanzar el 10,5%, por encima del conjunto de España, según las previsiones del último informe Situación Illes Balears, presentado por Miguel Cardoso, economista jefe para España de BBVA Research, y David Conde, director de la Territorial Este de BBVA. El documento señala que la actividad económica en Baleares se habría reducido cerca del 12,1% en el primer trimestre de 2020 y un 23,7% en el segundo.
Para 2020 el Servicio de Estudios de BBVA espera una caída del PIB en la región del 20%, mayor que la prevista para el conjunto de la economía española (-11,5%). El desplome del turismo, la prolongación de las medidas de confinamiento más de lo esperado, el mantenimiento o la recuperación de algunas restricciones que afectan a la demanda interna y la revisión a la baja del crecimiento de Europa impactan negativamente en los sectores como los viajes, el alojamiento, el ocio o la restauración, con un peso elevado en la economía balear. Todo ello explicaría la intensa reducción de la actividad en las islas en 2020.
La flexibilización de las restricciones de movilidad, así como la reapertura del turismo y de los sectores asociados al consumo social favorecieron una intensa recuperación económica, que habría alcanzado el 22,4% en el tercer trimestre respecto al anterior, cerca de 6 puntos porcentuales por encima de España.
Apoyada además por el notable impulso fiscal y del crédito, tanto a nivel nacional como del Govern, que desde marzo ha puesto en marcha diversas medidas para la protección de los colectivos sociales más vulnerables, así como para mejorar la liquidez de las empresas y evitar despidos. En este sentido, destaca el Plan de choque para la ocupación con una inversión de 72 millones de euros, los aplazamientos de deuda tributaria y las líneas de financiación otorgadas en conjunto con la Sociedad de Garantía Recíproca.
En el ámbito social, los aumentos de presupuestos para la renta social garantizada.
En este contexto, BBVA Research prevé para 2021 un aumento del PIB balear del 10,5%, lo que supone una recuperación mayor que la de la media de España (6%). No obstante, este crecimiento no sería suficiente para recuperar el nivel de actividad previo a la crisis, que se mantendrá aún un 11,6% por debajo del observado al cierre de 2019.
Recuperación a niveles precrisis
Los recientes rebrotes de la COVID-19 y las medidas restrictivas adoptadas en las últimas semanas para contener la expansión de la enfermedad mantienen la incertidumbre elevada, por lo que la expectativa de recuperación se modera para los próximos trimestres, tanto en Illes Balears como en España. Así, desde octubre se observa una pérdida de dinamismo que, como en el primer semestre, es más intensa en los sectores relacionados con el ocio y el turismo que presentan ya tasas negativas.
Además, se mantienen diversos riesgos que podrían continuar afectando a la velocidad de la recuperación. Por un lado, la desaceleración esperada de la economía española y europea podría afectar a la demanda de servicios con un peso relevante en el PIB balear. Además, la existencia de una vacuna que permita recuperar los desplazamientos, así como la mejora de la economía de Reino Unido y Alemania condicionarán la recuperación del sector turístico.
La elevada incertidumbre estaría afectando, tanto al consumo como a la inversión. En el caso de Balears, tanto las importaciones de bienes de capital como la inversión en vivienda sufren una reducción mayor que la media de España. Ante ello, el consumo y la inversión de las administraciones públicas podrían actuar como estabilizadores económicos.
Optimismo
De cara unos meses, se incrementa la probabilidad de que se presenten escenarios más positivos. La cantidad de vacunas en una fase avanzada de prueba hace más probable que se pueda contar con algún remedio efectivo durante el próximo año y medio, clave para la recuperación del sector turístico en la región. Por otro lado, el efecto de los fondos del Next Generation EU (NGEU) y las reformas que se puedan acometer para hacer frente a las debilidades estructurales de la economía son también factores que pueden generar una aceleración del crecimiento, sobre todo durante la segunda parte del año. Para ello, se hace necesario un consenso sobre las medidas que serán necesarias para cumplir la condicionalidad a la que están sometidos los mencionados recursos. Si con la vacuna se consigue mejorar la confianza de los viajeros y se aprovecha esta oportunidad para realizar las reformas pendientes en la economía balear, el escenario podría ser más positivo.