El Sindicato Médico calcula que para que el IB-Salut pueda atender a la actual población según las ratios europeas harían falta unos 90 especialistas más y más de un centenar de médicos en los centros de salud. Es más, según el presidente de la Sociedad de Pediatría Familiar, Juan Carlos de Carlos, la mitad de las plazas de pediatría no están cubiertas por un especialista.
El problema no es nuevo, muchos médicos llevan años denunciándolo, pero ha aflorado con la pandemia, en todo el Estado. De ahí que el Ministerio de Sanidad aprobara un decreto pensado para gestionar recursos humanos, que permite ejercer a médicos sin una titulación homologada o intercambiar profesionales sin tener en cuenta su especialidad. Una medida que resolvería carencias pero que, según los afectados, pondrían en riesgo la salud de los pacientes.
Una decena de representantes de diferentes sociedades científicas del Foro de la Profesión Médica en Balears se unió en rechazo al Real Decreto Ley de medidas urgentes 29/2020 pidiendo su inmediata retirada y asumiendo las reivindicaciones de la huelga convocada para el próximo martes. «Los ciudadanos tienen derecho a ser tratados por médicos formados en su país», exigió el presidente del Col·legi de Metges, José Manuel Valverde, quien explicó que de las 780 homologaciones exprés hechas por el Gobierno durante la pandemia, apenas 220 se han quedado a trabajar en España.
Aseguran que la formación en medicina, en este país, es de las mejores del mundo pero no así las condiciones laborales. Cuando un facultativo termina de formarse prefiere irse a trabajar al extranjero, de ahí que hace años que falten especialistas.