Si el año pasado apenas el 45,5 % de la población de riesgo llamada a vacunarse se inmunizó contra la gripe, la aspiración este año es llegar al 75 % recomendado por la Organización Mundial de la Salud. Y es que llegar al 100 % se antoja imposible ya que la Conselleria ha hecho acopio de 262.710 dosis para proteger al máximo a los grupos diana que, en Baleares, suman 365.938 personas. Es decir, hay dosis para cubrir al 78 % de los colectivos que lo necesitan pero no a la totalidad.
Algo parecido sucedió en la campaña del año pasado cuando a pesar de querer vacunar a más gente que en el anterior, se adquirieron las mismas 144.100 dosis. Antes de finalizar la vacunación muchos centros de salud quedaron desabastecidos y la Conselleria tuvo que comprar más vacunas porque resultaron insuficientes.
Este año la apuesta ha sido mayor, Salut ha comprado 180.000 dosis y dispone de un fondo de 82.710 más por parte del Ministerio. Y es que, según la consellera Patricia Gómez, «en los estudios de campo se ha visto que aquellas poblaciones bien vacunadas de la gripe tienen una incidencia de coronavirus más baja, se intuye que la vacuna contra la gripe es capaz de proteger parcialmente de la COVID», dijo. Por otra parte, «hay evidencia de que las personas que se infectan a la vez con ambos virus tienen tres veces más mortalidad que las que se contagian sólo por uno de los dos», señaló. De ahí que se prevea un incremento de la demanda.
La campaña para vacunarse contra la gripe empieza en Baleares el próximo lunes 19 de octubre y durará hasta el 4 de diciembre. Se realizará íntegramente en los centros de salud que, para no acumular pacientes, tienen previsto abrir los dos fines de semana del mes de octubre, una medida que podría prorrogarse.
Por otra parte, Salut ha repartido dosis para su suministro a las residencias geriátricas y de personas discapacitadas, hospitales, centros penitenciarios y mutuas de trabajadores. Este año las clínicas privadas sólo podrán administrarlas a personas incluidas en grupos de riesgo y las farmacias apenas dispondrán de dosis para vender a la población general.
Entre los conocidos grupos de riesgo se incluyen a todos los mayores de 65 o personas con enfermedades crónicas, a quienes la gripe puede descompensar sus patologías.
También es prioritaria la vacunación durante el embarazo y este año, como novedad, se ha añadido a las mujeres que hayan dado a luz antes de la campaña y hasta 6 meses después del parto, como medida de protección indirecta del bebé.
Otro colectivo considerado de riesgo son los profesionales de la salud, los cuidadores o trabajadores de centros sociosanitarios y los empleados de servicios de respuesta rápida a la ciudadanía como son la policía o los bomberos.
Por otra parte, se incluyen entre los grupos diana que deben inmunizarse a los docentes y cuidadores de escoletas y centros de educación infantil con niños a cargo de 0 a 5 años.