La directora general de Salut Pública del Govern balear, Maria Antònia Font, ha negado este miércoles que haya habido «improvisación» en la elaboración del plan de contingencia de coronavirus en Baleares y ha destacado la coordinación entre las Comunidades Autónomas, el Ministerio de Sanidad y el Ejecutivo balear durante la pandemia.
Así lo ha expresado Font durante su comparecencia en la Comisión de Salud del Parlament balear, donde ha explicado el plan de contención frente a los rebrotes en las Islas a petición del Grupo Ciudadanos.
A pesar de que Font ha puesto en valor el funcionamiento del plan, ha insistido en que éste «no lo es todo». «O todo el mundo desde casa toma conciencia de lo que puede hacer a nivel individual y colectivo o un virus nos ganará la partida», ha señalado.
Asimismo, Font ha considerado que en la 'meseta' de esta segunda ola de la pandemia, el nivel de contagios «no será tan bajo como en la primera», pero ha destacado que la intención es que se mantenga el máximo tiempo posible.
«El virus lo estamos conociendo diariamente, pero cada día sabemos algo más», ha señalado.
LÍNEAS DEL PLAN DE CONTINGENCIA
Según Font, el pasado 20 enero ya se aprobó un primer plan de contingencia de manera conjunta entre CCAA y Ministerio de Sanidad, el cual se puso en marcha el día 30 de ese mismo mes, cuando aún no había casos de COVID-19 en España.
En este sentido, ha recordado que el primer caso en Baleares se dio el pasado 9 de febrero. Un positivo que, según Font, provocó 71 contactos estrechos. «Nadie sabía lo que pasaría y cómo se debería actuar, todo se hizo con coordinación con el Ministerio, el centro de alertas europeas y las CCAA», ha indicado.
Respecto al confinamiento, ha destacado que fue «excelente» en Baleares y que el pico se situó entre los 60 y los 80 casos diarios en las Islas.
De acuerdo con la directora de Salud Pública, el 15 de abril la Comisión Europea presentó el plan de ruta europeo frente a la pandemia, en el que se resaltaba la importancia de una buena vigilancia epidemiológica y que sirvió como base para elaborar el plan de contingencia de las Islas, el cual se puso en marcha el 21 de junio.
Font ha explicado que el plan de contingencia de Baleares consta de tres líneas: la detección de casos y el rastreo, la notificación y el aislamiento de positivos o contactos y la contención de los brotes.
Por otra parte, ha señalado que en cada ámbito se han diseñado planes de contingencia específicos, como en el ámbito hospitalario, el sociosanitario, el penitenciario y de instituciones cerradas, el educativo, el comunitario, el laboral, el de personas migrantes y en la llegada a puertos y aeropuertos.
Asimismo, la directora general ha asegurado que el volumen de actuaciones que ha requerido la pandemia ha hecho preciso reforzar el equipo de Salud Pública con la puesta en marcha de un gabinete técnico dotado con 10 profesionales.
Éste tiene por objetivo reforzar la estrategia para afrontar la pandemia, potenciando la coordinación y la comunicación entre el sistema sanitario y otras áreas de la Administración Pública.
LOS GRUPOS CRITICAN LA FALTA DE RESPUESTAS
Durante las preguntas de los grupos parlamentarios a Font, la mayoría de los partidos han censurado la «falta de respuestas» de la directora general.
Entre ellos, el diputado de Cs Juanma Gómez ha criticado que la directora no ha ajustado su exposición al objetivo de la comparecencia y ha cuestionado la «coordinación» a la que ha hecho referencia Font, recordando el brote en s'Arenal de Llucmajor del pasado mes de julio.
Gómez ha considerado que Font ha hecho algunas «manifestaciones inadmisibles» durante su intervención y le ha pedido que dimita. «Ha hecho una exposición muy didáctica y clara, pero esta comisión hace un año que funciona y los gráficos ya los tenemos», ha expresado.
Desde el Grupo Popular, la diputada Tania Marí también ha criticado que el motivo de la comparecencia era explicar los planes de contingencia. «Una vez más no ha hecho nada de autocrítica en su gestión», ha lamentado.
Marí ha preguntado porqué la segunda ola «ha sido tan intensa» en Baleares y «qué se ha hecho mal para que desde agosto haya sido de las CCAA con las peores datos de contagios».
Por su parte, la diputada de Unidas Podemos Antònia Martín ha considerado que desde el Govern se debe mejorar la información a la población y ha preguntado a la directora que explique porqué «el virus ataca más a aquellas personas que menos tienen».
Asimismo, ha reclamado que se diferencie la gestión de la crisis entre residencias privadas y públicas.
También desde MÉS per Mallorca, el portavoz de la formación en el Parlament, Miquel Ensenyat, se ha sumado a la petición de Unidas Podemos para diferenciar la gestión por residencias y ha cuestionado que el coste de las residencias privadas se tenga que pagar con dinero público.
Por parte del Grupo Vox-Actúa Baleares, la diputada Idoia Ribas ha cuestionado «la fiabilidad de Font como directora, cuando el 7 de marzo decía que no tenía sentido llevar mascarillas».
«¿De quién fue la idea de abrir puertos y aeropuertos sin controles?», ha preguntado Ribas, a la vez que ha asegurado que en otros países sí que se hacen controles a los viajeros mientras que en Baleares no.
Por último, la diputada de El PI-Proposta de les Illes Balears Lina Pons ha señalado que en Baleares «no había un sistema sanitario extraordinario antes de la pandemia, sino unos sanitarios extraordinarios».
Pons ha considerado «una vergüenza que se intervenga en las residencias cuando las alarmas ya han saltado en los medios de comunicación» y ha preguntado qué ocurrirá con las unidades básicas de salud mientras dure la pandemia. «¿Estamos preparados para una tercera ola o nos cogerá como la primera o la segunda?», ha cuestionado.