Si se detectan los rebrotes es que las alarmas funcionan, o eso dijeron los expertos cuando se pusieron en marcha los equipos de rastreadoras en Atención Primaria.
Este martes surgió un nuevo rebrote de la infección por COVID-19 en Palma. El paciente índice, así como se denomina al primer detectado, se personó en el centro de salut de La Vileta donde le tomaron las muestras que posteriormente dieron positivo.
A partir de ahí se aplicó el protocolo sanitario y se confirmaron cuatro infecciones más, una persona que convive con la primera y otros tres contactos estrechos residentes en otros barrios de la ciudad, según confirmaron desde Salut. Se trata del segundo rebrote detectado esta semana, pues el lunes se confirmó otro en Eivissa que afectó a cuatro miembros de un mismo núcleo familiar, todos ellos leves o asintomáticos.
Ya son ocho los pequeños rebrotes detectados en las islas desde que se rastrea cada caso, con fecha posterior al 11 de mayo. Salvo el de Eivissa, se localizan todos en Mallorca. El más extenso fue el de la familia que regentaba un locutorio en Son Gotleu que afectó a doce personas. Éste fue el único caso en el que se tuvieron que ingresar a dos de ellos en el hospital Son Llàtzer, aunque en su día ya se dijo que fue más por motivos sociales que sanitarios.