El Sindicat de Llogateres i Llogaters de Mallorca promueve una huelga de inquilinos para no pagar el precio de los alquileres ante las medidas anunciadas por el Gobierno, que atañen específicamente al alquiler de vivienda en el contexto de la crisis del coronavirus en España. Entienden que las mismas suponen «un fraude a las arcas públicas y el endeudamiento de millones de inquilinos a los que quieren condenar a pagar los precios más abusivos de la historia».
Esta organización de inquilinos, con bastante implantación en ciudades como Madrid y Barcelona, registra día a día nuevas adhesiones de ciudadanos de Baleares preocupados por la actual situación de los alquileres, agravada por la crisis del coronavirus.
En su llamamiento a la huelga de inquilinos destacan que «en el momento de crisis sanitaria y económica más aguda de la historia nos negamos a figurar como deudores durante diez años por la avaricia de un puñado de rentistas y por la tacañería de este gobierno, que se niega a suspender los costes de alquileres y suministros, así como ayudar a aquel pequeño propietario que se quedará sin ingresos».
Censuran que el decreto del Gobierno no diga nada sobre «tomar el control de las viviendas de los grandes propietarios», o de una «quita completa o parcial de los gastos de luz, agua y gas, suministros básicos proporcionados por empresas multinacionales, privatizadas y rescatadas».