Baleares ha amanecido este sábado con el anuncio de la declaración del estado de alarma con largas colas en los supermercados, cierres de negocios y menos afluencia de gente por las calles. Ante el anuncio de la declaración del estado de alarma de España y el anuncio del Govern balear del cierre de determinados establecimientos en Baleares como nueva medida para frenar el avance del coronavirus las Islas afrontan este sábado con incertidumbre y preocupación.
Una estampa habitual durante estos días y que este sábado sigue repitiéndose es la de las largas colas en los supermercados. La gente sigue aglomerándose en estos establecimientos a pesar de las recomendaciones y mensajes de tranquilidad sobre el abastecimiento de alimentos. Los estantes siguen quedándose sin alimentos y se suceden escenas de tensión en algunos lugares al producirse peleas por hacerse con determinados productos.
En la mañana de este sábado una de las imágenes más llamativas se ha producido en Ca na Paulina donde se han aglomerado decenas de personas en la entrada. Esta imagen se ha repetido en varios establecimientos de Palma.
En mercados como el de Pere Garau se ha registrado menos puestos y gente con mascarillas. La carne ha sido uno de los productos más demandados.
En un supermercado de Marratxí se ha precisado la presencia de la Guardia Civil para controlar la aglomeración de gente que se ha concentrado en el lugar.
En cuanto a otro tipo de establecimientos, como tiendas, bares y restaurantes, algunos han ido echando el cierre a lo largo de la mañana de este sábado siguiendo las medidas del Govern.
También se podía ver una menor afluencia de gente y de tráfico por las calles de Palma.