Esta año es muy probable que no haya procesiones de Semana Santa en Mallorca, una medida que el Obispado tiene todavía en estudio siguiendo las recomendaciones de las autoridades sanitarias por el brote de coronavirus. La decisión afectará a todos los desfiles procesionales mientras que «también se analiza el formato que se adoptará en las celebraciones litúrgicas más relevantes de la Semana Santa», según indicaron responsables de la Diócesis mallorquina.
La decisión cuenta, según los datos disponibles, con el apoyo de la Asociación de Cofradías de Penitentes de Palma.
Cabe señalar que este jueves, la presidenta del Govern, Francina Armengol, ‘recomendó' la suspensión de este tipo de eventos «para evitar aglomeraciones». El encuentro con los responsables de las diócesis también incluirá a las de Menorca y Eivissa.
Otra de las novedades que se piensa poner en marcha con carácter inmediato es la suspensión de las visitas turísticas a la Catedral, una decisión que, en este caso, corresponde al Cabildo y que podría hacerse público en las próximas horas. El templo sólo abrirá sus puertas durante el horario de celebración de las misas.
Una disposición similar se hará extensiva a todas las iglesias de Mallorca.
Catequesis y retiros
En este contexto, y siguiendo las recomendaciones de las autoridades sanitarias, el Obispado de Mallorca comunicó ayer a todas las parroquias que se suspendan las catequesis y todas las actividades formativas, conferencias y reuniones, en las que participen personas de cualquier edad. De igual forma quedan anulados los retiros cuaresmales previstos para las próximas semanas.
Asimismo, se ha instado a todas las asociaciones y movimientos diocesanos que aplacen o se cancelen todas las actividades hasta nuevo aviso.
Las misas, mientras tanto, se mantienen con los horarios habituales, siguiendo las medidas de prevención ya publicadas.