PSOE, Unidas Podemos y PNV han acusado este martes a Ciudadanos de usar políticamente el caso de presuntos abusos a menores tutelados en Baleares y no pensar en el interés superior del menor que, según han recordado, está «por encima de cualquier otro», en cambio PP y Vox han defendido el texto presentado por la formación naranja.
El Pleno del Congreso ha debatido una proposición no de ley de Ciudadanos sobre este tema y que el partido naranja ha decidido ampliar este mismo martes con una autoenmienda. Entre los nuevos puntos añadidos han pedido la creación de una comisión de investigación del caso en el Congreso, una propuesta que no ha gustado a la mayoría de los grupos.
Por parte del PP, la portavoz popular en materia de Igualdad, Margarita Prohéns, ha lamentado que PSOE y Unidas Podemos hayan «tomado partido por defender a sus partidos en vez a las menores» en este caso y apunta que esta actitud pone en «evidencia» al Gobierno que se llama de progresista y feminista. «Demuestren que a las menores tuteladas no las quieren calladas y ocultas», ha declarado.
También la representante de Vox, Mireia Borrás, ha criticado las políticas del un Ejecutivo que se ampara en el «socialcomunismo». En su intervención, la diputada ha señalado que esta situación demuestra la incapacidad del Estado para el cuidado de los menores. «Si ya nos oponemos a la intromisión del Estado a la educación, más aún después de demostrar su incompetencia en el cuidado de menores bajo su tutela», ha declarado. También ha señalado que este caso pone en evidencia el «sistema de autonomías», así como las políticas de la izquierda sobre la mujer ya que, según ha apuntado, cuatro de las cinco personas apartadas de su puesto por comportamiento inadecuado en el caso de Baleares eran mujeres.
Durante la defensa del texto, la diputada de Ciudadanos Marta Martín, ha pedido evitar el «enfrentamiento entre partidos» ya que, según ha indicado, el objetivo de esta iniciativa es «la protección integral de los menores y que no sucedan casos» como este.
Aún así, se ha dirigido especialmente a la bancada «de la izquierda» y a aquellos que gestionan los gobiernos responsables de estos centros en el archipiélago --PSOE y Unidas Podemos-- para que no obstaculicen la investigación de los hechos. «Si no apoyan la investigación no vuelvan a abanderar la defensa del feminismo ni de los más vulnerables», les ha pedido.
Ciudadanos quiere que estos políticos reconozcan que «algo ha fallado» en este tema y que es necesario averiguar «dónde y por qué» para ponerle solución. «Sólo queremos que se asuman responsabilidades y que se comprometan a apartar a aquellos políticos que impidan investigar», ha insistido Martín.
CON EL ANTERIOR TEXTO HABRÍA CONSENSO
Sin embargo, los argumentos de los naranjas no han convencido a PSOE, Unidas Podemos y PNV, que le han recriminado que no esté pensando en el interés superior del menor. Además, los morados y Equo han lamentado que hayan «rechazado» el consenso que hubieran conseguido con la proposición inicial, y que ahora no van a tener tras lo que consideran un «intento» de unirse al discurso de PP y Vox.
El portavoz del PSOE en este debate, Pere Joan Pons, cree que el objetivo de los de Inés Arrimadas es «intentar dañar al Gobierno progresista» y «sembrar dudas sobre el compromiso» de este con la infancia y con la lucha contra los abusos y la trata. Además, les ha reclamado «responsabilidad» ante un caso delicado y ante unas niñas a las que «ser centro de batallas de políticas partidistas» no les conviene.
Frente a las críticas de Ciudadanos de no querer investigar, Pons ha recordado a los naranjas que el caso está judicializado. Un hecho al que también se ha referido la representante de Unidas Podemos Mar García Puig. En su caso, la diputada ha reconocido que el caso de Baleares es un «suceso gravísimo que debe investigarse hasta sus últimas consecuencias» pero ha señalado que, cuando hay menores implicados, ha de hacerse «siempre con rigor y cuidado».
Tanto socialistas como morados han lamentado que el primer texto naranja habría conseguido el apoyo de todas las fuerzas políticas de la Cámara, pero, a su juicio, con la iniciativa actual no es posible porque, según indica, se vulneran competencias y la legislación española.
Para Unidas Podemos, además, esta actitud de los de Inés Arrimadas es consecuencia de su intento de seguir con el discurso de PP y Vox en esta materia. Un punto que han apoyado tanto Equo como PNV.
Los nacionalistas han recordado que en el Pleno de la semana pasada, PP y Vox cuestionaron al Gobierno sobre este tema con una actitud que, a su juicio, no buscaba la defensa del interés del menor. Si así fuera, ha explicado el portavoz del PNV, Mikel Legarda, habría en la propuesta iniciativas contra los abusadores o el peligro de revictimización de los niños. Legarda ha apuntado, además, que este iniciativa es incompatible con la Ley de Enjuiciamiento criminal o la de protección del menor.
Su homóloga de Equo, Inés Sabanés, ha apuntado que de lo que habría de ocuparse el Congreso es de evitar las 20.000 denuncias que se registraron en 2019 por violencia contra los menores, de las cuales más de 3.000 fueron agresiones sexuales. «Casi nueve denuncias diarias», ha lamentado.