El Consell se libra de pagar una indemnización de 32 millones de euros a Mac Insular, la empresa concesionaria de la gestión de escombros y residuos de demolición. El Tribunal Superior de Justicia de les Illes Balears (TSJIB) ha dado la razón a la institución insular en una sentencia de este mismo mes en la que rechaza la pretensión de la empresa de percibir esta cantidad porque alega pérdidas económicas.
La sentencia certifica otra anterior en la que también se daba la razón al Consell, pero Mac Insular presentó un recurso que acaba de perder. La empresa sostenía que presenta un desequilibrio económico financiero de 32,5 millones de euros por «incumplimientos graves» en las obligaciones contractuales del Consell, «así como en el ejercicio de sus potestades administrativas de vigilancia, inspección y sanción».
Vertidos ilegales
En esencia, lo que defendía Mac Insular es que el Consell no combatió la proliferación de vertidos ilegales de escombros y que la consecuencia de esta dejación de funciones ha sido la ruptura del equilibrio económico financiero de la concesión. La empresa pedía también una modificación del contrato tras la aprobación de una ordenanza sobre la gestión de este tipo de residuos. Es decir, como no entraban las toneladas de residuos previstas porque presuntamente iban a vertederos ilegales, el Consell debe compensar a la empresa gestora.
El TSJIB rechaza todos los argumentos que plantea la empresa. Para empezar, señala que cuando se firmó el contrato se hizo bajo la premisa de «riesgo y ventura» de la concesionaria y añade que ese hipotético desequilibrio que argumenta no debe incluir «las expectativas de beneficio», como hace la concesionaria en la demanda.
Pero la clave de la sentencia está en el hecho de que el Consell de Mallorca no tiene las competencias en materia de inspección y sanción ya que esta es una competencia exclusiva del Govern. Concluye que difícilmente se puede hacer dejación de unas funciones que en realidad son de otra institución.
Inspección del servicio
La sentencia insiste en que las labores de inspección y sanción son de la Conselleria de Medi Ambient del Govern balear y las únicas competencias en la materia que tiene el Consell son para inspeccionar que la concesionaria cumple sus funciones de forma adecuada. Tampoco apoya la idea de Mac Insular de que se modifique el contrato «sin haber concretado debidamente esta modificación».
Menos ingresos pero también hubo menos gastos
La empresa asegura que, como no entraron las toneladas de escombros previstas, tampoco ha tenido los ingresos económicos previstos.
Pero también aquí la sentencia desmonta los argumentos de Mac Insular porque dice que la empresa se ha visto beneficiada de algunos incumplimientos contractuales como la falta de inversiones «por importes millonarios» o el descenso de los costes laborales y de mantenimiento, con algunos servicios subcontratados.