Comer azúcar no provoca cáncer, si bien es cierto que no se recomienda a ningún nivel porque el exceso se asocia a muchas enfermedades. Tampoco hay que atribuir milagros a las propiedades de ciertos alimentos como el té verde o a los frutos rojos, que si bien pueden ser saludables, no curan enfermedades oncológicas.
Son algunos de los mitos en alimentación asociados al cáncer que se desmontan en la Guía nutricional para pacientes oncológicos y sus recetas. La publicación se presentó ayer en la Asociación contra el Cáncer de Baleares (AECC) se ha elaborado con la colaboración de Cocineros Afincados en las Islas Balears (Ascaib) y el Colegio Oficial de Dietistas-Nutricionistas del archipiélago (CODNIB).
«A veces recibimos tanta sobreinformación que hay que saber cuál es la correcta», explica la dietista Lara Prohens, que ha participado en su elaboración.
La guía recoge consejos dietéticos que se han confeccionado teniendo en cuenta las necesidades y afecciones causadas por el cáncer que pueden padecer los pacientes. «Por ejemplo, qué comer teniendo en cuenta los efectos secundarios más importantes como son las náuseas, vómitos, diarreas, alteración del gusto o del olfato», comenta Prohens. «Explicamos los efectos y damos recomendaciones en cada caso o para adaptar su alimentación».
Si un paciente padece vómitos, según este manual, debe comer cada pocas horas y en poco volumen y es mejor nutrirse de alimentos más secos que líquidos en un lugar tranquilo y aireado. «Hay que evitar alimentos fritos, condimentos o grasientos», añade la experta.
Además, antes de un tratamiento conviene dejar comida cocinada y siempre, a mano, «botes de legumbres que no generen olor, o que no cueste trabajo de elaboración».
El manual publicado recoge además un total de 43 recetas de cocina saludables realizadas por 44 prestigiosos cocineros en de todas las Islas, entre ellos, incluso chefs con estrellas Michelin. El recetario también incluye diferentes tipos de cocina desde vegana y asiática hasta recetas tradicionales que se hacen con productos típicos del Archipiélago balear. Algunas propuestas se recomiendan para pacientes oncológicos con falta de apetito y pérdida de peso e incluso con dificultad para masticar.
Aunque recuerdan que la alimentación no sólo es un factor a tener en cuenta para los enfermos oncológicos, también es importante para la prevención de enfermedades.