El duelo es el proceso emocional de enfrentarse a una pérdida y esta semana, en la clase de cinco años de los Jardines de la Infancia Pureza de María, lo han gestionado convirtiendo el dolor en oportunidad.
La despedida de Carlotta Keweloh Sagristà a causa de un tumor cerebral ha hecho más fuertes y valientes a los pequeños de cinco años que ha dejado en su clase de Infantil. Padres y alumnos recogen el testigo de la lucha y entereza de Carlotta y lanzan una campaña en las redes sociales para continuar el legado de esta pequeña «superheroína». Quieren recaudar fondos para ASPANOB, la asociación de padres de niños con cáncer de Baleares, y aportar así su grano de arena a otras familias con su misma lucha diaria.
Carlotta Keweloh padeció durante dos años un tumor poco frecuente, de crecimiento rápido y actualmente incurable que se da predominantemente en niños y adolescentes. La hija de la farmacéutica Malena Sagristà, de Son Rapinya, se ha marchado pero su recuerdo y su legado continua en clase, de donde tiende la mano a muchos otros niños.