Alrededor de 500 personas participan este domingo en Palma en la caminata organizada para concienciar acerca de la prevención del ictus, que afecta a unas 4.000 familias en Baleares.
El ambiente festivo con música, payasos y zancudos ha marcado el recorrido de los más de ocho kilómetros que separan la Catedral de Mallorca y Ciutat Jardí, en un una jornada a la que se acercaron gente de todas las edades, especialmente familias con niños pequeños.
Teresa Villar es una de las organizadoras de la caminata y explica que «la sociedad tiene que saber que cada vez se dan más casos de ictus en gente joven, incluso de 20 años. El sedentarismo, el tabaquismo y la mala alimentación son factores de riesgo que aumentan las posibilidades de sufrir esta enfermedad».