El pasado sábado falleció en Sant Joan José Ribas Salom, director y propietario de la Autoescuela Ribas, a los 78 años.
Casado y con tres hijos, también era gestor administrativo, oficio al que ya se dedicaba su padre.
La noticia de su muerte sorprendió a muchas de las personas de su entorno, que expresaron su pesar y lo recordaron como una excelente persona, cercana y sonriente.
En los años ochenta ya formó parte de la junta directiva de la Asociación de Autoescuelas de las Islas y pese a ser gestor, se dedicó en cuerpo y alma a la autoescuela que actualmente regentan sus hijos.
Fue pionero en conseguir la enseñanza para que los conductores recuperaran los puntos del carnet de conducir y se caracterizaba por su predisposición a ayudar siempre a quienes se lo pedían.
Pese a estar jubilado aún acudía a la autoescuela y la profesionalidad fue otra de sus virtudes.
El funeral por su alma se celebró este lunes por la noche en la parroquia de Sant Joan y sus más allegados le recordaran con la sonrisa en la cara con que siempre recibía a todo el mundo.