El tiempo medio de espera para obtener una cita previa para la ITV deberá ser de 13 días laborables cuando el nuevo contrato para la gestión del servicio entre en vigor, presumiblemente dentro de 2020. Así se establece en las condiciones del nuevo contrato, todavía en fase de licitación.
El pliego de condiciones señala también que la adjudicataria deberá presentar cada seis meses los resultados estadísticos del tiempo promedio de espera ante el Consell de Mallorca. Y «en caso de que se den desviaciones sobre el plazo fijado, se procederá a su análisis e imposición, si cabe, de la penalización correspondiente», según se determina en el nuevo contrato. Actualmente, el tiempo de espera es de unos cuatro meses, pero con suerte puede ser inferior (si el solicitante encuentra una cita recién liberada). Esta situación ha provocado malestar entre los conductores.
El pliego de condiciones se refiere en otros puntos a este aspecto. Por ejemplo, dice que la nueva adjudicataria «deberá implantar el sistema necesario» para poder justificar cuál es el tiempo de espera medio de cita previa y que el Consell deberá tener acceso informático en todo momento a esta información.
Tanto el Consell como los afectados por el colapso coinciden en que la espera se ha disparado por la falta de capacidad para atender todas las peticiones y se ha dicho que la solución está en habilitar nuevas líneas, abrir otra estación o ampliar el horario de las actuales. El pliego de condiciones no habla de nuevas líneas o estaciones, pero sí de horarios, y mantiene los actuales. En concreto, las estaciones estarán abiertas de 7 a 18.30 horas en invierno y de 7 a 14.30 en verano, de lunes a viernes.
Hay que tener en cuenta que las empresas que concursan pueden mejorar las condiciones establecidas en el pliego. El tiempo de espera medio no podrá superar los 13 días laborables, pero sí ser inferior. Lo mismo ocurre con los horarios: los reseñados arriba son los mínimos exigidos, pero debería valorarse positivamente su ampliación.
La intención del Consell era que la nueva concesionaria del servicio –o la misma, dado que SGS ha vuelto a presentarse al concurso– comenzara a operar el 1 de enero de 2020, aunque puede que sea más adelante. Se trata de un contrato para gestionar el servicio durante dos años y es prorrogable a otros dos. El presupuesto base de la licitación sube 1,94 millones de euros y el valor estimado del contrato supera los 40 millones.
Está por ver cómo se va a proceder si la nueva estación de ITV, que debe construirse en el municipio de Calvià, entra en funcionamiento antes de que finalice el nuevo contrato. El pliego no se refiere a ella.
Las tasas
El pliego de condiciones prevé una rebaja de un 40 por ciento en las tasas, sin perjuicio de que la oferta económica de la licitadora que finalmente gane el concurso plantée una rebaja todavía mayor. Además, las tasas las cobrará directamente el Consell de Mallorca, que posteriormente se encargará de pagar a la concesionaria. En la actualidad, las tasas las cobra la conesionaria, que después abona un canon al Consell.