El grupo de Vox en el Consell de Mallorca ha presentado un escrito de queja para denunciar que después de mes y medio de la investidura aún no tiene despacho ni acceso personal a un ordenador.
Es una «clara injusticia, al margen de la ideología que cada cual defienda», ha explicado la formación este lunes en una nota de prensa.
El partido ha destacado que el acceso a un ordenador es «algo de vital importancia», ya que no puede acceder a comunicaciones oficiales por vía interna, como convocatorias de comisiones y plenos, ni al envío de documentación corporativa.
Este hecho le «obliga» a tener que redactar sus iniciativas en las zonas comunes del Palacio del Consell, «con la falta de discreción que ello supone».
El gobierno de Catalina Cladera «no solo no quiere llegar a acuerdos con nosotros, sino que directamente nos está marginando para que no podamos realizar nuestra función fiscalizadora en los primeros compases de la legislatura», ha asegurado el portavoz de Vox en la institución balear, Pedro Bestard.