La Federación de Asociaciones de Vecinos de Palma y otras 24 entidades han firmado este lunes un manifiesto conjunto en el que solicitan al Govern y al Ayuntamiento que limiten la entrada al puerto a «un solo crucero por día» y a «un máximo de 4.000 cruceristas».
«El aumento de las medidas de los cruceros» y «el incremento del número de naves» de este tipo que arriban al puerto de Palma supone «un gran problema» para las entidades, mayoritariamente vecinales y ecologistas, que este lunes han dado a conocer sus reivindicaciones para reducir el impacto de los grandes barcos turísticos.
Entre otras medidas, exigen a la Autoridad Portuaria de que «controle diariamente y divulgue los impactos ambientales de los cruceros en consumo de agua, electricidad y contaminación de aire y agua».
Las entidades ciudadanas también exigen a la Autoridad Portuaria que vigile que todas las empresas de cruceros que visitan Palma cumplen con sus obligaciones fiscales y laborales.
Otra de las peticiones reflejada en el manifiesto es que se aumente el importe del impuesto que pagan los cruceristas.
La plataforma pide que ese impuesto turístico sea de 5 euros, cantidad que debería destinarse, según sus representantes, a «compensar los gastos públicos y privados que genera el impacto de las excursiones masivas de cruceristas en el centro de Palma».
Las entidades ciudadanas que firman el manifiesto también piden a las autoridades que declaren Área de Control de Emisiones del Mediterráneo (zona ECA) el puerto de Palma, tal y como ocurre en el Mar del Norte y en el Mar Báltico.
«Queremos una ciudad para ser vivida, no para ser consumida», ha dicho Mariano Reaño, de Amics de la Terra (Mallorca).
Las entidades ciudadanas que han firmado el manifiesto son la Federación de Asociaciones de Vecinos de Palma, Palma XXI, ARCA, GOB, Terraferida, Ecologistas en Acción, Amics de la Terra, Ciutat per a qui l'habita, Lobby de Dones, Tramuntana XXI, Salvem Es Molinar, Juventud por el Clima-Fridays For Future Mallorca, Mallorca Preservation Fund y Asociación Amigos de los Lazos Grises.
También se han sumado a la iniciativa asociaciones de vecinos de La Calatrava, Banc de s'Oli, Canamunt-Ciutat Antiga, La Llotja-Puig de Sant Pere, El Terreno, Es Jonquet, Coll de'n Rabassa y Son Espanyolet, asó como Salvem Portocolom y Centre Mallorquí de Negocis (CNM).
«Debemos tener las llaves de nuestro puerto y de nuestro aeropuerto», ha dicho en rueda de prensa el representante de Ciutat per a qui l'habita, Manel Doménech.
Doménech ha asegurado que el transporte marítimo contamina «mil veces más que el terrestre» y ha insistido en que los cruceros «dañan la biodiversidad del fondo marino».
Otro punto que las entidades consideran injusto es el hecho de que la mayoría de cruceros que llegan a Palma «operan con banderas de paraísos fiscales como Malta, Bahamas y Panamá, y no pagan impuestos en España».
La representante del GOB, Margalida Ramis, ha señalado que este tipo de barcos «genera entre 200.000 y 400.000 metros cúbicos de residuos» y que el 24 % del total de la basura sólida que se encuentra en los mares procede de este tipo de embarcaciones.
Los portavoces de la plataforma no han descartado llevar a cabo acciones de protesta si las autoridades no acceden a sus peticiones.