El president de la Generalitat, Quim Torra, acudió este jueves en Sant Francesc al funeral por Aina Moll, que fue directora general de Política Lingüística de la Generalitat en los años 80. Torra, acompañado por su consellera de Cultura, Laura Borràs, mostró su satisfacción por como se han desarrollado las primeras jornadas del juicio del 1-O en el Tribunal Supremo de Madrid, ya que «desde el pacifismo, se está desnudando al Estado español».
Antes de acudir a la Basílica de Sant Francesc, Torra se reunió en Can Alcover con los dirigentes de la Obra Cultural Balear. Allí anunció que «volveré pronto, puesto que tengo previsto dar una conferencia en Mallorca».
Ante varias decenas de miembros de la OCB que acudieron a saludarle, Torra se deshizo en elogios hacia la figura y el ejemplo de Aina Moll, a la que calificó como «la arquitecta» del inicio de la normalización lingüística en Catalunya. El president de la Generalitat indicó que «fue la persona que comenzó en proceso lingüístico y es una persona muy querida en todos los Països Catalans».
A su vez explico que «en Catalunya también celebraremos un homenaje en memoria de Aina Moll».
Seguidamente, y entre los aplausos de los socios de la OCB, incluido algún grito de «Visca Catalunya!», el president destacó el carácter «pacífico y democrático» de la lucha del independentismo catalán para alcanzar la plena soberanía.
Subrayó que a partir de este pacifismo y de la forma en que se está desarrollando, «este juicio, desde el primer día, está desnudando el Estado español» , mostrando «esta causa contra Catalunya mediante este proceso político que se está convirtiendo en una persecución contra los representantes del pueblo», que defienden «la idea de libertad y de la independencia de Catalunya».
Así, explicó, respecto al referéndum del pasado uno de octubre que «votar no es delito. Lo que sí es delito es que te peguen cuando estás votando».
Torra intentó así desmontar las tesis de los fiscales de esta causa, que defienden que hubo rebelión y violencia por parte de personas que estaban en los colegios electorales «cuando lo único que hicieron fue acercarse a las urnas». Para Torra no hay duda de que se trata de «un juicio para criminalizar una idea: el anhelo de libertad». También calificó de «excepcionales y valientes» los testimonios de Oriol Junqueras y Joaquim Forn en la jornada de ayer en el juicio de Madrid. «Han sido capaces de desmontar con la verdad desnuda todo el cúmulo de falsedades que esta causa contiene». No escondió su satisfacción por como se está desarrollando el juicio y por la firmeza que están demostrando los encausados. Ve que se está convirtiendo en un gran altavoz internacional.