La Agencia de Defensa del Territorio de Mallorca (ADT) ha informado este miércoles de que la demolición voluntaria de una vivienda ilegal construida en una zona protegida de Pollença, y el pago anticipado de la sanción, han supuesto la reducción de la multa impuesta al propietario de unos 30.000 a unos 1.300 euros.
Además, el responsable de la obra ha renunciado a recurrir en contra de la resolución de derribo.
La ADT ordenó la demolición completa, que se llevó a cabo el pasado diciembre, de una vivienda de 175 metros cuadrados, con piscina y terraza de solera de hormigón de 220 metros cuadrados, construidos sin licencia en suelo rústico protegido, en un Área Natural de Especial Interés (ANEI) en Pollença.
La entidad ha recordado que en suelo con dicha calificación el uso como vivienda está prohibido, y además se trataba de una parcela de pequeñas dimensiones, inferior a 4.000 m².