Malena Contestí (Palma, 1985) es la joven abogada y actual vicepresidenta de ACTUA Baleares/VOX. Hija del histórico presidente del RCD Mallorca Miguel Contestí, fundó el partido junto con Jorge Campos, Sergio Rodríguez y Juan Sendín en febrero del 2018. Se considera feminista y cree que hay muchas cosas que cambiar en este ámbito.
¿Por qué abogan por la modificación de la Ley Integral de Violencia de Género (LIVG)?
— Esta ley está mal en muchos aspectos: el tema de las subvenciones no incluye a los hombres ni a los integrantes de la familia, y hay una cantidad ingente de subvenciones que prácticamente no llegan a las víctimas de violencia de género, porque hay un lobby feminista que por desgracia va de la mano de esta ley. Nosotros consideramos que debe modificarse para que incluya al resto de miembros de la familia, y para ver en qué cantidad se está realizando todo esto.
Ustedes proponen la ley de violencia intrafamiliar, pero ya existe la Ley 27/2003, que protege a las víctimas de la violencia doméstica. ¿Qué modificaciones harían?
— La efectividad de esta ley no es la adecuada, pero si existiera una ley que fuera efectiva, ¿por qué no aplicar la misma a todo el mundo? Si hay que aplicarla más veces a hombres, se aplicará. Nosotros queremos que los maltratadores sean castigados con dureza, pero ¿cuando entran los hombres en calidad de maltratadores y a costa de qué? Queremos que la mujer maltratada tenga una protección de calidad, pero cuando una mujer denuncia se ponen en marcha una serie de mecanismos garantistas para la mujer, sea maltratada o no. Ahí está el problema. Las denuncias hacen un computo inadecuado de la violencia de género, no se tienen en cuenta a las denuncias falsas ni a los hombres maltratados, pero se dan millones al lobby feminista. Hoy en día hay feministas profesionales, que han hecho del feminismo su profesión.
Fueron 97 las mujeres asesinadas en 2018, y ya son más de 1.000 desde que se contabilizan, en 2003. A pesar de eso, ¿quieren retirar la LIVG?
— No queremos retirarla, queremos modificar el procedimiento por el cual se llega a poder castigar a un hombre y por qué no se puede castigar a las mujeres de igual manera. Nosotros, a un feminicida, le meteríamos cadena perpetua, y nos parece curioso que las feministas de manual quieran volver a sacar a la calle a estos personajes.
¿Cómo acabarían con la violencia intrafamiliar, qué mecanismos tienen previstos poner en marcha?
— Las penas tienen que aplicarse de forma contundente, tiene que haber un control policial más amplio, tiene que haber unas medidas de prevención efectivas, consideraciones económicas iguales tanto para los hombres como para las mujeres.
Además de la LIVG, ¿creen que hay alguna ley más que discrimine al hombre?
— Realmente, todo está relacionado con la violencia de género. Salen muchas ramificaciones, por ejemplo, cuando una mujer presenta una denuncia ya tiene ventajas laborales y económicas. Pero tiene que haber igualdad real.
¿Qué puntos comparten con el feminismo actual?
— La igualdad entre hombres y mujeres. A día de hoy, en el que tenemos igualdad jurídica, laboral... Podríamos hablar a nivel social, por ejemplo, de como organizarse para avanzar en los cuidados igualitarios, pero no podemos apoyar desigualdades jurídicas.
¿Creen que hay en Balears algún organismo feminista radical?
— Aquí entra el Institut de la Dona o el Institut por la Igualtat, que reciben subvenciones que en ciertos casos se aplican sólo en favor de la mujer.
Aquí tienes el vídeo con la entrevista íntegra.