Cerca de 800 trabajadores de Gesa Endesa en Baleares están llamados este viernes a iniciar un calendario de paros durante diciembre y enero en protesta por el «bloqueo» de la negociación del nuevo convenio colectivo, y la «estrategia de descapitalización, desmantelamiento y externalización» que lleva a cabo la multinacional italiana, ha indicado hoy, el sindicato UGT.
Los paros han sido convocados por los sindicatos UGT, CCOO, y SIE y se realizarán de manera coordinada en todo el territorio nacional.
En los centros de trabajo de Endesa en Baleares está previstas seis jornadas de huelga, la de mañana viernes de 11.00 a 12.00 horas, y los días 19 de diciembre, 10 de enero, 16, 23 y 30 de 11.30 horas a 12.00.
La sección sindical de UGT en Endesa ha criticado por medio de un comunicado, lo que considera una actitud «intransigente» de la dirección de la empresa en las negociaciones.
En opinión de este sindicato esta actitud «impide» llegar a un acuerdo que renueve el actual convenio laboral de los empleados, cuya vigencia acaba el 31 de diciembre.
Los sindicatos que convocan los paros, denuncian la negativa de los responsables de la empresa a prorrogar los Acuerdos de Garantías y el Acuerdo Voluntario de Salidas, que permitirían «dar estabilidad» a la plantilla en un situación de «dificultad» por la previsión de cierre de centrales térmicas, como la de Es Murterar.
También han apuntado que la «ausencia» de un «verdadero» plan de reindustrialización para las zonas afectadas por estos clausuras, que tienen como causa la transición energética.
Además, han censurado que durante la negociación del convenio la dirección de la multinacional no haya modificado ninguno de sus planteamientos.
«Está siguiendo las directrices de los propietarios de la compañía, la empresa italiana Enel, que quiere aprovechar la reforma laboral para reducir derechos laborales, económicos y sociales, mientras siguen aumentando sus beneficios», ha señalado UGT en un comunicado
Según las organizaciones sindicales, los «excelentes» resultados económicos de la compañía vienen de la reducción de costes, la gran mayoría laborales, así como de un recorte «continuado» de las inversiones con el objetivo de «desmantelar de manera progresiva la compañía».