El director general de Consumo, Francesc Dalmau, declaró este lunes que el acoso telefónico por parte de empresas comerciales «debe ser denunciado» para evitar «el abuso» y situaciones como las que está viviendo Emili González Fuster.
Tal y como informó este periódico, Emili González, un jubilado que vive en la calle Aragón de Palma, está sufriendo lo que para él es un auténtico acoso.
Desde hace unos quince días no deja de recibir llamadas telefónicas a todas horas. Se ha puesto en contacto con su compañía telefónica para denunciar los hechos, pero cuando le van a pasar con el departamento correspondiente le dejan más de media hora esperando y nadie le atiende.
Denuncias
Francesc Dalmau reconoció que situaciones como las que está viviendo este ciudadano no son muy habituales. «Nosotros recibimos como mucho unas 50 reclamaciones al año, pero insistimos en que es importante reclamar», dijo el director general.
Si el ciudadano presenta una reclamación ante la Direcció General de Consum, desde el departamento se ponen en contacto con las empresas que llaman para hacerles saber que están siendo investigadas y hacerlas desistir de esta práctica comercial que puede ser considerada como abusiva.
Otra opción que tiene el ciudadano que se siente acosado por constantes llamadas telefónicas de carácter comercial es inscribirse en la ‘Lista Robinson', «el único problema que tiene» esta lista, según Dalmau, «es que su inscripción no es efectiva hasta que han transcurrido tres meses» desde ese momento.
En esta lista se puede inscribir de forma voluntaria y gratuita cualquier persona física que lo desee. Su objetivo es evitar que el ciudadano reciba publicidad no deseada de entidades o empresas a las que no haya facilitado sus datos o no sea cliente.
«Seguro que el problema que tiene este ciudadano, Emili González, es que está recibiendo llamadas de empresas de las que no es cliente», añadió Dalmau.
El director general insistió en recomendar a González, y todos los que puedan estar sufriendo una situación similar, que acuda a Consum a denunciarlo.
Por otra parte, Dalmau recordó que «los sectores que más reclamaciones generan ante Consum son precisamente telefonía e internet», con un total de 1.614 reclamaciones presentadas en 2017.
El director general destacó la importancia de presentar reclamaciones, ya que son el observatorio real del comportamiento de las empresas y contribuyen a «luchar contra las prácticas abusivas y desleales de determinadas empresas».
En 2017 se iniciaron 321 expedientes sancionadores y se resolvieron 241. «Aunque el número de expedientes fue similar al del año anterior, la cantidad de las sanciones ha aumentado considerablemente», expuso Dalmau, recordando que alcanzaron un total 1.341.626 euros, como consecuencia de un total de 7.546 reclamaciones.