Alrededor de medio centenar de personas se han concentrado este martes en la plaza de Cort para pedir una vez más al alcalde de Palma, Antoni Noguera, que paralice el derribo de las viviendas del poblado hasta que les den una vivienda alternativa.
Sulamita, es una de las vecinas de Son Banya y ha explicado a los medios que será una de las afectadas esta semana por los derribos. «Dicen que no queremos que lo tiren porque allí se vende droga. Que no. Queremos que lo tiren, pero no queremos irnos en esas condiciones».
Esta mujer tiene seis hijos y asegura que no se marchará del poblado sin una vivienda alternativa para ellos. No quiere ir a un albergue porque, sostiene, que allí sus hijos «no verán nada nuevo».
Este miércoles se retoman las labores del derribo en el poblado.
El abogado Gonzalo Márquez ha mostrado el contrato de adjudicación de albergue provisional y sostiene que para que se vayan de Son Banya tienen que tener antes una vivienda alternativa.
Tras la concentración en Cort, los vecinos de Son Banya se han trasladado hasta el Parlament balear, donde harán entrega de 1.200 firmas. Allí, a las puertas del Parlament, están realizando varias reivindicaciones. «Queremos casa» o «Son Banya unido jamás será vencido».