Los alcaldes de Valencia, Joan Ribó, y Palma de Mallorca, Antoni Noguera, han intercambiado este lunes experiencias e ideas en la apuesta de sus respectivos equipos de gobierno por regular los apartamentos turísticos, fomentar la movilidad sostenible y luchar contra el cambio climático. Ambos han mantenido un encuentro con este fin en las dependencias de Alcaldía del Ayuntamiento de Valencia.
«Queremos intercambiar experiencias. Nos parece muy importante compartirlas», ha asegurado Joan Ribó. Por su parte, Antoni Noguera ha considerado un «auténtico placer poder compartir estrategias de modelo de ciudad con una ciudad hermana y mediterránea como Valencia».
El primer edil de Palma ha indicado que las ciudades tienen ante sí, para ser «modernas, europeas, resilientes, verdes y creativas», «retos importantes» entre los que ha destacado «el acceso a la vivienda, la lucha contra el cambio climático y la movilidad sostenible».
Por lo que respecta a los temas de vivienda y la regulación de los apartamentos turísticos, Ribó ha valorado medidas «interesantes» adoptadas en la capital balear, al tiempo que ha señalado que esta es una cuestión que a su ejecutivo «preocupa por muchos aspectos: por los vecinos, por el crecimiento del precio de los alquileres y porque también define el modelo de turismo de una ciudad».
El primer edil de Valencia, que ha resaltado también las iniciativas adoptadas por este ciudad en dicha regulación, ha reiterado que «los apartamentos turísticos necesitan control por parte del ayuntamiento, control de calidad urbanística». Ha afirmado que en la capital valenciana «se ha puesto en marcha» y ha subrayado que, en consecuencia, «todas las peticiones de registro han sido rechazadas» hasta el momento.
Asimismo, ha mencionado entre los requisitos puestos en esta ciudad que este tipo de alojamiento «solo pueda estar en el primer piso o en edificios solo para eso». «Los apartamentos turísticos como economía colaborativa están bien pero tal como los están planteando las grandes empresas, a veces con fondos buitre que compran edificios enteros, decimos claramente que no», ha manifestado.
El alcalde de Palma ha expresado también su interés por acometer políticas de vivienda que fomenten los alquileres y que regulen sus precios. En este sentido, ha recordado la petición hecha «desde hace tiempo» en favor de «una modificación de la ley de arrendamientos urbanos» con el fin de «pasar de tres a cinco o siete años» y así dar «más estabilidad al inquilino».
Igualmente, se ha apuntado la necesidad de acometer «una limitación de precios» para evitar que diferencias entre zonas y subidas. «Para nosotros la limitación de precios, con un precio de referencia, con un precio máximo y tope es muy importante», ha precisado.
Noguera ha comentado, respecto a los apartamentos turísticos que Palma comparte la «preocupación» con Valencia. Con todo, ha defendido la aplicación de «políticas valientes y decididas en vivienda» con «normativas claras» y «servicios de inspección» para «poder plantar cara a una de las cuestiones más importantes, el acceso a la vivienda por parte de residentes».
«No hay peor cosa para un alcalde que el hecho de que se vaya gente porque no puede seguir viviendo en una ciudad», ha declarado el responsable municipal. Tras ello, ha mostrado también su decisión de luchar «contra el cambio climático» y fomentar «la movilidad sostenible».
«POLÍTICAS DECIDIDAS Y VALIENTES»
Antoni Noguera ha considerado que «la lucha contra el cambio climático desde los municipios debe ser una de las premisas principales». «Más árboles, bosques urbanos, peatonalizaciones, uso de la bicicleta y transportes de alta capacidad», ha citado como iniciativas en esta línea, además de felicitar «al Ayuntamiento de Valencia por sus políticas decididas y valientes en movilidad sostenible».
Preguntados por el modo en el que desde 2015, con el cambio de gobierno en ambos ayuntamientos, se han reforzado las relaciones entre Valencia y Palma, Ribó y Noguera han resaltado que ambas ciudades cuentan con alcaldes que no son ni del PP ni del PSOE.
El primer de Palma ha dicho que en su caso se trata de un primer edil «de izquierdas muy vinculado a lo ecologista» y ha calificado de «buena y fluida» la relación con Valencia. «Asumimos y compartimos los restos de nuestras ciudades. Las ciudades mediterráneas tenemos mucho en común. Además de tener una cultura y una lengua hermanas ahora mismo tenemos la capacidad de poder hacer estrategias comunes. Los ayuntamientos tienen el poder de decidir que afecta a la felicidad del residente», ha declarado.
«HACER DE LOBBY»
Asimismo, ha valorado que consistorios como «Barcelona, Valencia y Palma puedan hacer de lobby para reivindicar al Estado cambios que para estas ciudades son muy necesarios como la inversión en transporte público» también.
Joan Ribó ha resaltado tanto la coincidencia «en aspectos culturales» como «en la defensa del medio ambiente y el territorio, aspectos que cada vez tienen más peso en Europa». «Tenemos que defender nuestro territorio, nuestro medio ambiente. Hay una identidad de posicionamiento muy claro y es importante compartir experiencias y trabajar conjuntamente. Así se aprende y se crece», ha expuesto.