La Conselleria de Salud ha informado de que ya se ha constituido el jurado que seleccionará en el plazo de un mes el proyecto ganador para construir el complejo sociosanitario del nuevo Son Dureta, entre las dos propuestas presentadas.
Las dos propuestas aspirantes al concurso de ideas del complejo sociosanitario se abrieron este lunes, cuando se constituyó el jurado, presidido por el secretario general del Servicio de Salud, Manuel Palomino, y compuesto por seis miembros del Ib-Salut; uno de la Dirección General de Arquitectura del Govern, dos del Ayuntamiento de Palma y otros dos del Colegio Oficial de Arquitectos de Baleares, ha informado la Conselleria de Salud en una nota.
El Govern anunció a principios de 2017 que Son Dureta se convertirá en un centro socio-sanitario especializado en la atención a la cronicidad.
Este año se ha licitado el derribo de algunos edificios del antiguo hospital: el materno, el de consultas y el de vestuarios y cocina, además de algunas pequeñas edificaciones auxiliares. Se prevé que la demolición sea a principios de 2019.
Paralelamente, se licitó el concurso de ideas del proyecto arquitectónico que se elegirá en un mes.
El nuevo complejo sociosanitario de Son Dureta ofrecerá 542 camas hospitalarias para estancias de 30 días a 3 meses de media, durante los que los pacientes recibirán tratamientos y cuidados dirigidos a estabilizar la enfermedad, rehabilitarse y recuperar su autonomía personal.
El plan funcional del proyecto prevé la remodelación del edificio semicircular para ingresos de estancia media (edificio A) y construir un edificio nuevo de larga estancia (edificio B).
Los dos bloques albergarán los servicios para pacientes crónicos que no requieran tratamientos invasivos ni alta tecnología.
El edificio A, con 300 camas y una superficie aproximada de 33.000 metros cuadrados, costará unos 50 millones, y albergará un centro de estancia media.
Estará destinado a la convalecencia de pacientes, generalmente con alguna enfermedad crónica, que necesitan tratamiento, cuidados y rehabilitación como consecuencia de alguna descompensación o bien después de una intervención traumatológica o bien porque requieren las atenciones del servicio de neurorrehabilitación.
También está previsto atender a él pacientes con enfermedad respiratoria crónica avanzada y pacientes crónicos y oncológicos que requieran estar ingresados para controlar los síntomas.
El edificio albergará también un hospital de día, una Unidad de Demencia con Trastorno de Conducta (como el Parkinson o la enfermedad de Huntington), espacio para la Fundación Banco de Sangre y Tejidos; y una zona destinada a asociaciones y otros servicios.
En cuanto al edificio B, de nueva construcción, albergará 242 camas, y tendrá una superficie de 35.000 metros cuadrados, con un coste estimado de 55 millones.
Acogerá un centro de cuidados especiales de estancia larga para pacientes crónicos y grandes dependientes que necesiten estar ingresados para recibir cuidados complejos continuados que no se pueden proporcionar a domicilio.
El proyecto incluye en el edificio B un centro de salud para una población estimada de 20.000 personas y Servicio de Urgencias de Atención Primaria (SUAP) que prestará asistencia a 120.000.
Junto a este nuevo edificio habrá dos plantas subterráneas de aparcamiento gratuito con unas 560 plazas, y está previsto un pasillo de zona verde de unos 50 metros de ancho, que conectará con el bosque de Bellver.
La remodelación del recinto hospitalario de Son Dureta se enmarca en el Plan Estratégico de Atención a la Cronicidad para la atención de pacientes crónicos y mayores dependientes, colectivos que aumentan por el envejecimiento de la población. Actualmente el 15,3 % de los ciudadanos tienen más de 65 años, una proporción que en 2029 alcanzará el 22 %.