Los ciudadanos de Baleares con un patrimonio –bienes materiales y dinero– superior al millón de euros no han parado de crecer en los últimos años, al igual que el patrimonio que poseen, como se aprecia en el gráfico adjunto. En cuatro años, entre 2012 y 2016, el patrimonio declarado al fisco de estos contribuyentes se ha incrementado en casi 5.000 millones de euros.
En 2016 (último año del que la Agencia Tributaria dispone de datos que, precisamente, hizo públicos a principios de este mes), 7.489 contribuyentes de las Islas presentaron el Impuesto de Patrimonio por un valor de 21.524,3 millones de euros. El número de declarantes se incrementó en más de un millar en comparación con 2012, lo que representa un aumento porcentual del 16,8 %, inferior al crecimiento del 28 % del patrimonio declarado (4.718,6 millones de euros).
Esto significa que en las Islas no solo ha aumentado el número de contribuyentes con más bienes sino que algunos de estos declarantes han aumentado su patrimonio en los últimos años de recesión económica. Hay que recordar que las Islas empezaron a dejar atrás la crisis en 2013, año en que el producto Interior Bruto (PIB) cambió el signo negativo por el positivo, aunque a un ritmo muy moderado, según los informes de coyuntura del Govern. En cualquier caso, en 2016, la economía balear creció un 4,1 %.