El Ayuntamiento de Palma ha informado este jueves de que el proyecto de la fase III del camino perimetral del Bosque de Bellver tendrá un coste total de 321.900 euros --financiados al 50 por ciento por fondos europeos Feder--, y que el plazo estimado de ejecución es de cinco meses. Además, espera que el contrato esté adjudicado a principios de 2019.
En rueda de prensa, el regidor de Infraestructuras y Accesibilidad, Rodrigo A. Romero, ha explicado que de esta manera se continúa con la hoja de ruta establecida por el Plan de usos y gestión de Bellver, tras su modificación en 2016. «El objetivo es recuperar el bosque y evitar su degradación», ha dicho.
Romero también ha recordado que las fases I y II ya están terminadas y que cuando se termine esta fase III, que es la «más complicada de todas debido a la orografía del terreno», quedarán unos 2,5 kilómetros de camino --incluidos en la fase IV y V-- por adecentar y señalizar.
El concejal ha explicado que las tareas de acondicionamiento incluirán el desarrollo de un sistema de pluviales «más intenso», consistente en zanjas que atraviesan el camino para evitar que el agua circule de manera torrencial y degrade el camino.
Asimismo, ha detallado que la intención de este camino perimetral, que se prolongará 405 metros, es que se dejen de utilizar caminos alternativos que provocan la degradación del bosque. Para esto, se pondrán señalizaciones que indiquen la prohibición de paso y que expliquen los motivos por los cuales no se debe traspasar.
El concejal también ha explicado que el recorrido se ha tenido que «modificar» para incluir en su trazado el paso por la Finca de Son Berga, que se ha incorporado al conjunto del bosque en los últimos años. El camino se elevará 15 centímetros por encima del terreno natural, evitando la entrada del agua de lluvia procedente del bosque.
Debido a la pendiente del terreno, en algunos puntos del recorrido será necesaria la construcción de muros de piedra para la contención de tierras y terraplenes. Además se colocarán barandillas de acuerdo con el entorno como elementos de protección en los lugares donde exista riesgo de caída.
Por otro lado, Cort ha solicitado un presupuesto de 900.000 euros al Govern a cargo del impuesto de turismo sostenible (ITS) con el objetivo de eliminar caminos interiores. El plazo de ejecución para este proyecto es de 24 meses de duración.
Dentro de la campaña de control de la procesionaria, Romero ha dicho que los «datos preliminares» indican que este año habrá menos que en 2017 y que no llegará a los caminos perimetrales, donde ya el año pasado no se detectó. Aun así, ha dicho que se verán bolsas de procesionaria pero ha explicitado que las orugas estarán muertas.
Asimismo, el concejal ha reiterado que no pretenden su eliminación en todos los espacios, ya que es alimento para muchos animales y ayuda al equilibrio del bosque.