El presidente del PI, Jaume Font, ha defendido que los vertidos de aguas contaminadas que sean responsabilidad de las administraciones se denuncien ante la Fiscalía de Medio Ambiente, porque las instituciones también tienen que cumplir la ley.
Font ha señalado en rueda de prensa que administraciones públicas como el Ayuntamiento de Palma y la empresa autonómica Abaqua tienen un deber de «ejemplaridad», por lo que deberían ser objeto de sanciones cuando se vierten sin control aguas fecales al mar y tendrían que ser investigadas por si estos hechos son delictivos.
El líder de Proposta per les Illes (El PI), que fue conseller de Medio Ambiente con el PP, ha afirmado que los vertidos de aguas sin depuración terciaria que se han producido en los últimos meses no ocurrían hace 12 años, pero desde entonces «el mantenimiento se ha abandonado».
Además, fue un «fallo estratégico» modificar la regulación del canon de saneamiento para que dejara de ser una tasa finalista destinada exclusivamente a mantener y mejorar la red de depuración, ha subrayado.
Para Font, «el mal de las aguas depuradas» para la posidonia «es muy superior a las barcas».
El diputado exigirá en el pleno de mañana a la presidenta del Govern, Francina Armengol, que rectifique la política llevada a cabo esta legislatura e incremente notablemente en los próximos presupuestos los fondos para la depuración de aguas residuales.
Por otro lado, Font ha defendido que el ejecutivo debe retirar la Ley Agraria cuya admisión a trámite se debatirá mañana en el Parlament, porque «tiene una falta de consenso brutal con el sector» y de los propios grupos que apoyan al Govern, que han presentado el 95 % de las enmiendas.