Un tribunal de Gante (Bélgica) estudiará este martes la posible extradición a España del rapero mallorquín Josep Miquel Arenas, conocido artísticamente como Valtonyc y condenado en España por enaltecer el terrorismo e injuriar al Rey en las letras de sus canciones.
Se encuentra desde el pasado 5 de julio en situación de libertad en dicho país, al que huyó tras ser condenado en firme a tres años y medio de cárcel por el Tribunal Supremo.
Fuentes de la defensa del cantante han señalado que, entre otros argumentos, este martes expondrán ante el tribunal belga que no existe la doble incriminación que debe ser exigida para su entrega a España -que los delitos que se le atribuyen al rapero estén tipificados en ambos estados- y que además, los hechos por los que fue juzgado se incardinan en la libertad de expresión y no debieron tenerse por delictivos.
Valtonyc se presentó a principios de julio ante el juez de instrucción belga que tramita la orden de detención y entrega emitida por la Audiencia Nacional y éste resolvió dejarle en libertad mientras se resuelve el caso. Se le impuso, eso sí, la prohibición de salir del territorio belga durante el tiempo en el que los tribunales belgas tarden en tomar una decisión al respecto.
La Fiscalía de la región belga de Flandes Oriental se hizo cargo de la euroorden dictada contra el rapero mallorquín, quien fue condenado a tres años y medio de cárcel por delitos de amenazas, enaltecimiento del terrorismo e injurias a la corona.
La Sala Segunda del Tribunal Supremo confirmó a finales del pasado mes febrero la condena de tres años y medio de cárcel que la Audiencia Nacional había impuesto al rapero por delitos de enaltecimiento del terrorismo, calumnias e injurias graves a la Corona, así como amenazas por el contenido de algunas de sus canciones publicadas en Internet.
La Audiencia Nacional emitió a finales de mayo una orden nacional, europea e internacional de búsqueda y captura contra Valtonyc después de que abandonara el territorio español para evitar su ingreso en prisión justo un día antes de que expirara el plazo para entrar voluntariamente a la cárcel.