Dos miembros de la organización juvenil Arran han colgado este lunes una pancarta en un autobús turístico detenido en la zona del Castillo de Bellver (Palma) como acción de protesta contra la masificación turística.
Según han indicado fuentes de Arran, la actuación ha tenido lugar cuando los turistas estaban bajándose del vehículo en el Castillo de Bellver y también se han utilizado botes de humo.
Más tarde los jóvenes de Arran se han bajado voluntariamente del bus, que ha continuado con su trayecto con la pancarta aún colgada. Desde Arran han indicado que con esta acción no buscaban «confrontación» ni con los turistas ni con los trabajadores. Ha sido una acción pacífica y simbólica.
Arran ha informado de esta acción en un mensaje publicado en Twitter en el que proclama que «en los 'Països Catalans', la clase trabajadora en pie de guerra contra el modelo turístico».
El mensaje va acompañado de una fotografía en la que aparece el bus turístico de dos pisos con una pancarta llamando a «detener la masificación turística en los 'Països Catalans'».
El miércoles la organización prevé presentar una campaña relacionada con esta protesta.
También se han detenido buses en Barcelona y Valencia
Se trata del tercer bus objeto de un acción de protesta de Arran en la jornada. Este lunes, dos miembros de Arran han irrumpido este lunes en un bus turístico de Barcelona para colgar el mismo mensaje que en Palma, cuando el bus estaba detenido en la parada Port Olímpic.
En un comunicado, la organización ha explicado que han hecho una «acción reivindicativa contra el modelo turístico» en un autobús, donde han lanzado dos botes de humo en la parte superior del vehículo, que está descubierta.
Además, en Valencia otros dos miembros de Arran han irrumpido este lunes en un bus turístico para colgar la misma pancarta, cuando el bus estaba detenido en el paseo de l'Albereda, pocas horas después de hacerlo en el autobús de Barcelona.
El pasado 19 de junio, activistas de esta organización arrancaron su campaña '#capitalismofòbia' encadenándose al dragón del Parc Güell de Barcelona.
Desde Arran Palma han explicado que con esto buscan denunciar «que el modelo turístico y sus efectos afectan de forma similar» a estos tres territorios.