El Pacte prohibirá que haya nuevos hoteles en el centro de Palma, en Santa Catalina y en otras zonas donde la presión turística es muy elevada. Para ello, se realizará una modificación puntual del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) que impedirá que se puedan hacer hoteles en suelo residencial. Las intención es que se apruebe inicialmente en el pleno de julio, salvo que haya contratiempos.
A finales de este mes finaliza la moratoria de licencias para construir nuevos hoteles en el centro, Santa Catalina, Nou Llevant y la primera corona del Eixample, que fue aprobada hace un año y el gobierno tripartito temía que hubiese una avalancha de solicitudes de licencias para construir nuevos establecimientos hoteleros. Las licencias son actos reglados y si los demandantes cumplen los requisitos, la administración está obligada a concederlas.
Por ello, Cort quiere aprobar la modificación puntual del PGOU antes de que finalice la moratoria. Con la aprobación inicial ya no se aceptan nuevas licencias. Después, se inicia un periodo de exposición pública para presentar alegaciones, que se tienen que resolver, por lo que la aprobación definitiva podría ser en septiembre u octubre.
La prohibición de construir nuevos hoteles en el centro de Ciutat, Santa Catalina y las zonas saturadas turísticamente es una reivindicación de hoteleros y vecinos. En estos momentos, hay 38 hoteles urbanos en Ciutat con 2.169 plazas. Además, se están tramitando 63 licencias con 2.149 plazas más, que ya no se vieron afectadas por esta moratoria.
En su día, el edil de Urbanisme, José Hila, manifestó que «visto el crecimiento exponencial de esta oferta en los últimos años y proyectando la ciudad de los próximos 20 años conviene tener una oferta que Palma pueda digerir y que mantenga los estándares de calidad».