La Asociación de Usuarios del Tren ha criticado que Servicios Ferroviarios de Mallorca (SFM) anule el saldo de los clientes que se ven obligados a renovar su tarjeta por robo, pérdida o deterioro y reprocha también el elevado precio de la renovación: 8 euros.
Esta agrupación de clientes del tren de Mallorca exige a la empresa pública que aplique con sus tarjetas una política similar a la de la Empresa Municipal de Transportes (EMT) de Palma, que las renueva en caso de extravío sin coste y manteniendo el saldo.
«Parece difícil de entender una política donde la empresa se quede con el saldo de unos usuarios que ha bastante tienen con haber extraviado la tarjeta», que pierden el dinero que han abonado además de verse penalizados con el pago de 8 euros por un nuevo documento, indica la asociación en un comunicado.
Considera la entidad que castigar al usuario es una práctica contraria al propósito teórico de fomentar el empleo del transporte público.