La cadena de supermercados Lidl impulsa su apuesta por la sostenibilidad medioambiental con la eliminación de las bolsas de compra de plástico de sus tiendas en Baleares, una iniciativa que hará extensiva a toda España para apostar por alternativas más sostenibles con el objetivo de impulsar su reutilización.
«Lidl da un paso más con la eliminación de todas las bolsas de plástico de compra en las 550 tiendas que tiene en España, lo que supone un hito en la distribución española, ya que dejaremos de comercializar más de 100 millones de bolsas al año», ha anunciado el director general de la compañía en España, Claus Grande.
El directivo ha precisado que en España se consumen cerca de 7.000 millones de bolsas de plástico al año y sólo se recicla el 10%. Cada bolsa de plástico tiene un uso medio de 12 minutos, pero por el contrario tardan entre 100 y 500 años en descomponerse, según datos del Ministerio de Agricultura y Pesca, Alimentación y Medio Ambiente.
La decisión de Lidl, que ha empezado este 29 de mayo en el archipiélago y antes del verano llegará a Madrid y Barcelona, tendrá un impacto medioambiental al sacar de la circulación 100 millones de bolsas cada año, ahorrando al medio ambiente más de 1.300 toneladas de plástico, el equivalente a la superficie de 2.500 campos de fútbol.
Grande ha explicado que esta medida también conlleva un impacto económico, ya que la compañía dejará de ingresar 1,5 millones de euros cada año. La cadena de supermercados potenciará el uso de la bolsa de rafia, la alternativa más sostenible y que permite una mayor reutilización. Para incentivar su uso, la compañía ha bajado su precio hasta los 0,50 euros, manteniéndose así como la bolsa de rafia «más barata» del mercado.
Sin embargo, el director general ha asegurado que todavía «queda mucho terreno y camino por recorrer», ya que Lidl está trabajando y cuenta con varios proyectos para buscar alternativas y «seguir reduciendo el consumo de plástico» en las tiendas, sobre todo para retirar las bolsas de sección.
«Nuestra prioridad es la defensa del medio ambiente. No queremos vender bolsas, la de rafia permite una reutilización casi de uso infinito. Queremos que la gente se traiga su bolsa o su cesta desde casa», ha indicado.
Con esta medida, Lidl España sigue la estela de Francia y Alemania, donde la cadena de supermercados alemana ha ido eliminando las bolsas de plástico en los últimos dos años.
Por otro lado, Claus Grande ha recordado que la cadena de supermercados registró en España en su ejercicio fiscal 2017, cerrado el pasado 28 de febrero, unas ventas de 3.600 millones de euros, lo que supone un incremento de casi el 8% y que le ha permitido incrementar su cuota de mercado, consolidándose como el quinto operador con un 4,3%.
Respecto a la apuesta de Lidl por entrar en el comercio 'online', como están haciendo sus competidores, Grande se ha mostrado cauto y ha señalado que «en los próximos meses» avanzará información sobre su apuesta por el 'ecommerce'.