El Palacio de Congresos de Palma duplicará este año el número de asistentes a congresos, ferias y eventos de 2017, en el que se contabilizaron 173 eventos y 28.895 asistentes, según dio a conocer ayer el director general del complejo y representante de Meliá, Ramón Vidal, en la presentación de la memoria anual.
«Tal y como está evolucionando la demanda de congresos se duplicarán las cifras de 2017 y se puede llegar a los 60.000 asistentes. El balance de actividad del primer año lo calificamos de bueno, más aún cuando hemos tenido que empezar de cero», apuntó Vidal, que estuvo acompañado en la presentación por la presidenta del consejo de administración de la entidad Palau de Congressos de Palma SA, Joana María Adrover. La actividad congresual, según Vidal, generó en 2017 un impacto económico en Palma de 15 millones de euros, 43.518 pernoctaciones en Meliá Palma Bay y más de 15.000 en el resto de la oferta hotelera de la Bahía de Palma, sumando unas 59.000.
Los ingresos que obtuvo el Palacio de Congresos de abril a diciembre ascendieron a 9,4 millones, un 18 % más de lo previsto en el plan de negocio. Vidal explicó que en el desglose y reparto de este total, el 45 % fueron pagos a proveedores, el 33 % al coste de personal y un 25 % a los abonos a las administraciones por tasas e impuestos.
Vidal detalló que el resultado bruto de la operación del primer año alcanzó el 1,5 millones, pero que tras amortizaciones, impuestos y pagos a la propiedad por alquileres «arrojó un saldo negativo del 3,8 %, menos de lo previsto, pero este año el balance económico será positivo».
El objetivo que se ha marcado Meliá Hotels International es que el Palacio de Congresos de Palma se convierta en un referente europeo en el negocio de ferias, congresos y reuniones de empresa, al mismo tiempo que se pretende su máxima integración en el tejido social y empresarial de Mallorca. «Pretendemos convertirnos en una palanca clave de creación de valor añadido para Mallorca y el conjunto de Balears», incidió el director general.