La plataforma «Fins Aquí Hem Arribat», integrada por asociaciones ecologistas y vecinales, quiere que se restrinja a dos el máximo de cruceros atracados simultáneamente en el puerto de Palma y que se quintuplique el impuesto autonómico que paga cada crucerista para que abonen 5 euros por jornada.
La portavoz del Grupo Balear de Ornitología y Defensa de la Naturaleza (Gob), Margalida Ramis, ha defendido esta «ecotasa específica» para compensar el impacto de contaminación y uso de recursos de los cruceros, que este año traerán a Baleares unos 2 millones de turistas.
Ramis ha dirigido al Govern la reivindicación de incremento del impuesto a los turistas que viajen en cruceros, mientras que sobre la restricción de la presencia de cruceros en el puerto de Palma ha señalado a la Autoridad Portuaria de Baleares, entidad estatal cuyo presidente es designado por la administración autonómica, ha recordado.
La dirigente ecologista ha afirmado que en el puerto de la capital balear coinciden algunos días hasta seis cruceros, de cada uno de los cuales desembarcan hasta 5.000 personas, lo que representa un gran consumo de recursos y, además, genera colapsos que sufren los vecinos de la ciudad.