Los 18 incendios forestales registrados en Baleares en lo que va de año han quemado 2,3 hectáreas, según los datos de la Conselleria de Medio Ambiente, Agricultura y Pesca, que ha anunciado que este martes da comienzo la temporada de alto riesgo que se prolongará hasta el 15 de octubre.
El año pasado hubo 93 incendios, con 167 hectáreas afectadas, de los que el más importante fue el ocurrido en los últimos días de diciembre en el coll de Síller de Pollença, que quemó 79,5 hectáreas de matorral, y en el que la autoprotección fue capital para salvaguardar las viviendas, ha destacado la Conselleria en un comunicado.
El conseller de Medio Ambiente, Agricultura y Pesca, Vicenç Vidal, ha recordado la importancia que tiene la prevención porque, además del dispositivo que pone en marcha la Conselleria, la seguridad empieza por uno mismo, con la creación de áreas con carga baja de combustible, alrededor de las viviendas y urbanizaciones que estén en zona forestal.
Para la campaña de alto riesgo de incendio forestal que comienza este martes, se amplían a medio año los contratos de los trabajadores de refuerzo.
Hasta el 15 de octubre no se puede hacer fuego en ningún terreno forestal de Baleares ni a menos de 500 metros de estos, a excepción de quien disponga de una autorización administrativa especial para cada actividad que pueda generar peligro de incendios.
La concienciación y responsabilidad ciudadana es vital, ya que alrededor del 90 % de los incendios se originan por causas antrópicas, ya sea tanto por negligencias o accidentes como por causas intencionadas.
La Conselleria ha pedido un cuidado especial durante estos meses con las colillas de cigarrillos, el uso de maquinaria, las quemas de restos vegetales y el uso de material pirotécnico.
En cuanto al dispositivo de la Consejería para las tareas de extinción, al que se han destinado más recursos personales así como una mejora en las infraestructuras, lo componen 350 personas, entre ingenieros e ingenieros técnicos forestales, agentes de medio ambiente, capataces y componentes de brigada, personal de autobomba, vigilantes, operadores del CCIF y de las bases, mecánicos, auxiliares de PMA y tripulaciones de los medios aéreos.
Vidal ha destacado la importancia del equipo humano en esta campaña, y la ampliación del contrato de los trabajadores de refuerzo del Instituto Balear de la Naturaleza (Ibanat), que hasta ahora trabajaban durante cuatro meses, y este año pasarán a tener contratos de seis meses.
Esto refuerza el dispositivo durante más tiempo y, por otro lado, mejora las condiciones laborales dado que, de este modo, lo trabajadores tienen derecho a las prestaciones de subsidio de desempleo.
También se refuerza la formación técnica y la preparación física para mejorar la seguridad de las brigadas de extinción de incendios.
En cuanto a los recursos materiales en el operativo de extinción de incendios, este año se añadirán tres autobombas forestales más.
También se han hecho mejoras operativas y logísticas en la base de medios aéreos de Son Bonet, en Palma, con una nueva base modular, y se ha innovado en tecnología con cámaras de vigilancia automatizadas.
En cuanto a las medidas de autoprotección, se han adquirido lonas ignífugas de protección nuevas.