Madrid se cierra en banda. Dice que los tres bous de Costitx son suyos. El vicepresident del Consell, Francesc Miralles, recibió este jueves un «no rotundo» a la devolución por parte del secretario de Estado de Cultura, Fernando Benzo, en una reunión mantenida en el Misterio.
Miralles sólo consiguió por parte de Benzo una concesión a largo plazo. La posibilidad de que los bous pudieran cederse durante un tiempo muy limitado como exposición temporal, como ya ocurrió en 1995. Benzo estaba acompañado por el director general de Museos del Estado, Luis Lafuente.
El secretario de Estado le espetó al vicepresident y titular insular de Cultura que «esta cesión temporal no podrá ser hasta después de 2019 ya que pronto se celebrará el 150 aniversario del Museo Arqueológico Nacional y los bous forman parte de su personalidad museística, por lo que tendrán que quedarse». A su vez, Benzo indicó a Miralles que «en 1995 ya fueron expuestos en Mallorca y, por cierto, sufrieron algún deterioro», si bien admitiendo que «ahora los medios de conservación son mejores».
Miralles salió cariacontecido del Ministerio. Recordó a los altos cargos estatales que su petición obedecía a un acuerdo de pleno del Consell como con secuencia de una moción presentada por el PP, que se anticipó a una iniciativa que provenía del equipo de gobierno de izquierdas. «El PP nos dijo que se pondría en contacto con Madrid, donde gobiernan sus compañeros de partido, pero no lo ha hecho», señaló Miralles, quien destacó que «Benzo nos aseguró que el PP de Mallorca no había hecho ninguna gestión al respecto».
Madrid compró los tres ejemplares de Costitx al propietario de la finca de Son Corró en 1895. Le pagó 3.500 pesetas (21 euros actuales). El hallazgo fue casual. Los bous formaban parte de un santuario de la época talaiótica. Son de una perfección artística extraordinaria para su época, datada por los expertos entre los siglos V y III antes de Cristo.